Muchas cosas están haciendo que esta etapa de la Volvo Ocean Race pase a la historia. Primero, con 17 tripulantes españoles y, nada más y nada menos que, 3 patrones de 7 participando se ha batido un record de presencia española, por otro lado es la primera vez en la historia de la Volvo Ocean Race que se disputa en ceñida y por aguas completamente desconocidas para todos. Pero además de eso, la cuarta prueba está siendo una de las más disputadas.

Más de cuatro días de regata y sólo ocho millas separan a los tres barcos de cabeza. Tras la espectacular jornada que ha tenido como indudable protagonista al Telefónica Negro, el PUMA ha logrado adelantarse dos millas a los de Fernando Echavarri y colocarse líder.

Todo cambió tras el parte de las 20:00 horas de ayer. La flota viró al unísono poniendo proa al Norte para iniciar una guerra de zigzag que esta mañana sonríe al Telefónica Negro. El barco español ha abierto la brecha más grande desde el inicio de la etapa. A 370 millas del punto de paso obligatorio, el barco del equipo español ,ha recuperado en las últimas 24 horas terreno devorando las 12 millas que por aquel entonces le separaban del líder hasta ponerse en cabeza.

El día ha sido de infarto para todos lo integrantes de la Volvo Ocean Race, con el Telefonica Azul y el Puma alternándose las posiciones de líder. La flota, que continúa ciñendo en las inmediaciones de Brunei, se ha comenzado a separar y las distancias laterales ya empiezan a tomar su importancia.

La flota de la Volvo Ocean Race ha tomado las 24 primeras horas de la cuarta etapa como si de una procesión se tratase. Los tres barcos en los escalones del podio no podían estar más cerca y es que, pese a que el Puma de Ken Read ha estado liderando toda la jornada, el Ericsson 4 de Torben Grael y el Telefónica Azul del tándem Bekking/Martinez no le han dejado de presionar desde popa en todo el dia.

Las primeras 24 horas de la cuarta etapa de la Vuelta al Mundo mantienen a la flota, próxima ahora a Filipinas, en un puño y prácticamente en fila india sin muchas opciones tácticas a la vista.

La flota se dirige ya hacia Qingdao en la que está llamada a ser una de las etapas más duras de la historia de la regata. La salida de la cuarta etapa se ha realizado en hora y con unas magníficas condiciones en Singapur, con calor, sol y viento rondando los 20 nudos. La flota de la Volvo Ocean Race abandonó las aguas de Singapur tras haber realizado un pequeño recorrido costero que el Ericsson 4 y el Puma ha decidido liderar alto y claro y los Telefónica Azul y Negro realizaron una salida que les pasó una factura muy alta en el comienzo del recorrido

A punto de comenzar la cuarta etapa de la Volvo Ocean Race, todo estaría tranquilo en el Race Village de Singapr, sino fuera por el continuo ir y venir de los cargados equipos de tierra y los últimos comunicados del Comité de Regatas, mientras los equipos de regatas disfrutan de un merecido descanso antes de que en pocas horas de comienzo la etapa.

En apenas 48 horas la flota de la Volvo Ocean Race habrá tomado la salida de la cuarta etapa. A los siete Volvo Open 70 participantes les esperan unas tortuosas 2500 millas con vientos de altísima intensidad, mar arbolada y corrientes, además de una brusca caída de temperatura, según la flota vaya entrando en el mar Amarillo.

La cuarta etapa de la Volvo Ocean Race 2008-'09 es una travesía de 2.500 millas náuticas desde Singapur hasta China, que se espera que dure unas dos semanas. Pero esta etapa puede romper tanto a los barcos como a los hombres.