19/12/2002. Otra vez. La tercera marea negra
Índice del artículo
- Caso Prestige
- 18/12/2002. El temporal paraliza la recogida de fuel
- El fuel se acerca a la costa entre aguas, como un fantasma
- La marea negra vuelve a la Costa da Morte
- 19/12/2002. Otra vez. La tercera marea negra
- «Prestige» tiene cinco fugas más que las reconocidas
- El Gobierno encarga al 'Nautile' que selle todas las grietas
- 20/12/2002. Toneladas de fuel sepultan el litoral
- Abucheos de voluntarios obligan a Pastor a abandonar Cíes
- Una de las grietas del barco tiene más de tres metros
- Michele Gilkinet. Diputada belga de los Verdes
- FORO DE IDEAS
- Imaginación contra el chapapote
- Los percebeiros lanzan su ataque
Lo decíamos en nuestra crónica de la pasada noche. La tercera marea negra, ese mar negro, a las veces marrón, ese mar de destrucción y pobreza, vuelve a asolar las costas de Galicia. Mientras los políticos se enzarzan en saber quien realiza "la mayor insensatez, la mayor jilipollez" con desplantes parlamentarios, medias verdades, oposiciones blandas, informaciones censuradas y mucho bla bla bla. Lo mejor de este país, los voluntarios, marineros y ahora támbien la milicia, con sus manos y el rudimentario material que se les facilita, superando las cortapisas de los Tragsas de turno, mantienen esa dura batalla contra la marea negra que no termina, contra ese mar de fuel que asola y empobrece las costas de esta bella Galicia.
Las costas de Carnota, Camariñas, Muxía, Camelle, Fisterra o Corcubión pusieron ayer el maldito decorado para repetir por tercera vez esa escena que dura 34 largos días de la llegada de una nueva oleada de chapapote.
La gran mancha es ahora un frente muy fragmentado formado por decenas de grandes pegotes que se extienden entre el cabo Touriñán y la isla de Ons.
La costa de Carnota sufrió ayer otro impacto más, no sabría cuantificar que número es pues más grande o más pequeño no ha cesado en estas malditas 34 jornadas. En Lira, toda la zona de O Ximprón, casi un kilómetro y medio de litoral, apareció arrasada por el fuel, con capas de hasta 80 centímetros de espesor. El espectáculo en muchas playas era desolador. El chapapote lo cubría todo. La entrada de manchas se repitió casi de forma ininterrumpida desde este municipio hasta la Costa da Morte.
Al igual que en las Rías Baixas, fueron muchos los marineros que reacionaron saliendo a la mar para paliar la marea negra con sus propios medios. Olas de cuatro metros y vientos de fuerza seis no fueron suficientes para ellos, se jugaron la vida, porque saben que esa mar, esa costa es su tierra, su sustento, lo que conocen y viven.
En Corcubión, los marineros trabajaron en tierra y mar durante todo el día para recortar los impactos de los vertidos. Más al norte, en Camariñas, entre Vilán y Camelle, los percebeiros de Arou y Santa Mariña recogieron el fuel de las rocas desde sus botes.
El trabajo sin límites fue similar en Corme, Laxe, Malpica, islas Sisargas....
La solidaridad entre los marineros traspasa támbien territorios, según las previsiones de la Consellería de Pesca y el Instituto Hidrográfico portugués, podrían quedar a salvo de esta tercera marea negra el sector de Rias Baixas. El patrón mayor de Cambados, Benito González, aseguró ayer que si se confirma esta salvación momentánea, ofrecerán a sus barcos para colaborar en las tareas de limpieza en el norte.
La otra noticia son las previsiones que maneja el instituto luso. Los modelos de evolución que maneja Portugal del gran frente que se encuentra entre Ons y Touriñán indican que parte de esas manchas pasarán de largo arrastradas por la corriente de la vertiente y alcanzarán el Cantábrico.
Según el Hidrográfico, las manchas se desplazan a una velocidad de un kilómetro y medio por hora, a razón de unos 40 kilómetros al día. El parte meteorológico de la Xunta indica que esta tendencia se mantendrá, al menos, durante los próximos cuatro días.
Según los datos aportados, del total de 1.064 playas existentes en Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco, 500 están afectadas por el fuel derramado por el petrolero, de ellas 215 lo están "aparentemente", 94 tienen "pequeños restos" de fuel, 91 presentan "grumos dispersos", 16 "grumos abundantes", 5 están totalmente contaminadas y 84 con afecciones en rocas o zonas profundas que requieren un trabajo especializado.
Del medio millar de playas "parcialmente" afectadas, 279 se sitúan en la provincia de ACoruña; 42 en Lugo; 30 en Pontevedra; 19 en el Parque Nacional Islas Atlánticas; 75 en Asturias; 47 en Cantabria y 8 en el País Vasco. Las cinco totalmente contaminadas son Portodenegros, Lariño, Simpron y Ardeleiro, todas ellas en el municipio de Carnota, y Ancoradoiro, en Muros. Actualmente trabajan 7.200 personas en las labores de limpieza, de los que 2.264 son voluntarios, más de 3.000 de las fuerzas armadas y unos 1.700 corresponden a técnicos de parques nacionales, costas o contratados. Hasta ayer se recogieron 19.200 toneladas de fuel de las playas y hasta el momento las rocas no se están limpiando, porque se está a la espera de un informe solicitado al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Trece de los veintidós espacios naturales de Galicia se encuentran afectados. La Consellería de Medio Ambiente reconoció ayer que más de la mitad de las zonas protegidas sufren daños, pero no coinciden con los ecologistas en la valoración de estos. Desde el departamento del Gobierno gallego señalan que apenas quedan restos de fuel y que lo que aún está ahí se retirará pronto. Greenpeace repitió ayer que los espacios tocados son todos y que tardarán diez años en recuperarse.
Para la Xunta, la práctica totalidad de las lagunas incluidas en estos espacios se encuentran limpias de fuel, de acuerdo con el último informe del Gobierno gallego. El documento refleja también que hay barreras instaladas en doce de estos espacios, que están definidos como LIC (Lugar de interés comunitario), ZEPA (Zona especial de protección de aves) y RAMSAR (Convenio para protección de humedales).
La plataforma SOS Corrubedo no coincide en absoluto con la Consellería de Medio Ambiente.
La Xunta permitirá sólo a voluntarios y militares la limpieza del litoral
La Xunta decidió asumir en solitario la coordinación de las tareas de limpieza del fuel procedente del hundido "Prestige" a lo largo del litoral gallego. La conselleira de Asuntos Sociais, Corina Porro, será la encargada de dirigir a un amplio operativo que incluye a voluntarios y militares, que "no cobrarán por realizar estos trabajos" aunque sí lo harán los técnicos y los especialistas. La decisión del gobierno gallego significa reconocer la ineficacia de la empresa Tragsa para organizar la limpieza del litoral, tras las quejas realizadas por marineros, voluntarios y concellos.