¿Conquistar el Oeste? ¿Es buena la ruta Este? O tirar por la del medio... el tiempo lo dirá
La situación sigue siendo igual de confusa para la flota, que sigue tropezando con una zona de vientos flojos. Por el momento, los partidarios de un rumbo Este están de enhorabuena, como Jean Le Cam (Tout Commence en Finistère - Armor-lux), que se mantiene en cabeza desde esta mañana. La opción más occidental, liderada por Thomas Ruyant (VULNERABLE), parece estar recogiendo un poco más de viento y podría ofrecerse una ventaja bastante clara. Pero la situación está lejos de ser definitiva, aumenta el suspense.
Seis días de regata, 1.600 millas recorridas (2.960 km) y ¡más de un tercio de la flota en un radio de 150 millas! Son situaciones cuanto menos paradójicas para una Vendée. Haciendo memoria, a estas alturas de regata en anteriores ediciones, mirando la cartografía nos presenta un escenario atípico. En tierra los meteorólogos y especialistas intentan descifrar la salida del atolladero en la mar, es una guerra de nervios o a una etapa de la Solitaria del Fígaro, para cuya llegada faltan más de dos meses. ¿Las razones de esta situación? Estas grandes zonas de vientos flojos bloquean el paso a la cabeza de la flota, lo que ha provocado un reagrupamiento general desde ayer. A partir de ahora, todos intentan encontrar la mejor salida y escapar hacia el Sur, sin tener ninguna certeza.
Tres opciones y mucha incertidumbre
Es casi como un nuevo comienzo. Las velocidades van a cambiar", informa Christian Dumard, asesor meteorológico de la Vendée Globe. Va a haber muchos cambios de ritmo, muchas maniobras, y seguro que va a ser un día estresante".
Para entender bien la situación, tenemos que dividir la cabeza de la flota en tres grupos: los atrevidos del este, los buscavidas del oeste y los partidarios del centro. Los audaces del este son Le Roi Jean Le Cam (Tout commence en Finistère - Armor-lux) seguido del kiwi Conrad Colman (MS Amlin). Esta audaz estrategia permitió al rey Jean hacerse anoche con el control de la regata. "Nada arriesgado, nada ganado", dijo ayer a su mejor estilo lapidario. A medida que avanzaba el día, Jean parecía beneficiarse de unas condiciones más ligeras, lo que le obligó a tomar una ruta más hacia el oeste.
Giancarlo Pedote (Prysmian) , que forma parte del "grupo intermedio", se situó anoche en cabeza, una gran primicia para un patrón italiano en la Vendée Globe: "Tuve la suerte de tener un pasillo de viento en el centro, lo que me permitió alcanzar a los demás". A su cola, Sébastien Simon (Groupe Dubreuil) quiere creer en la consistencia de esta ruta.
Thomas Ruyant (VULNERABLE), el más al oeste de la flota, ha ido ganando velocidad a lo largo del día: su velocidad media ha pasado de 11 a 16 nudos. Es cierto que el norteño ocupa actualmente la 30ª posición, pero su elección podría dar sus frutos. Detrás de él, muchos otros apuestan por la misma opción. Es el caso de Charlie Dalin (MACIF Santé Prévoyance), Yoann Richomme (PAPREC ARKÉA) y Jérémie Beyou (Charal), que se encuentran a menos de 30 millas de Thomas Ruyant. Entre ellos, también está Louis Burton (Bureau Vallée): "¡Es otra gran carrera! El temor de todos es que los que consigan atravesar esta zona de calma puedan abrir un hueco inicial con el resto de la flota y ponerse en cabeza.
En cualquier caso, la ralentización general está beneficiando a Jingkun Xu (Singchain Team Haikou, 38º). El patrón chino, muy rezagado en los últimos días, ha recuperado casi 200 millas respecto a los líderes. Szabolcs Weöres (New Europe), está saliendo poco a poco de la fuerte depresión y se dirige al abrigo de las Islas Canarias para intentar reparar de alguna manera su equipo de velas. Maxime Sorel, por su parte, se tomó la molestia de hacernos una confidencia al día siguiente de su retirada. Explicó que sufría una "rotura parcial del ligamento externo" y que debía regresar a Francia mañana.