Richomme lidera en los IMOCA, Lipinski y Delahaye codo con codo en los Class40

Los patrones se han enfrentado a duras condiciones desde la salida y el cansancio, las gélidas temperaturas a bordo, la falta de sueño, así como los inevitables problemas técnicos y las roturas, están poniendo a prueba a regatistas y embarcaciones mientras los líderes superan el ecuador de la regata en el emblemático recorrido de Francia a Estados Unidos.

Mientras que el paso por la dorsal de altas presiones ha dado una pequeña tregua a los navegantes, que han aprovechado la calma para revisar sus barcos, los IMOCA navegan de nuevo con vientos fuertes desde primera hora de la mañana. Avanzan con vientos de 35 a 40 nudos con rachas de más de 45 nudos y mar muy corta, lo que les impide explotar todo el potencial de sus máquinas para preservarlas. Esto no desmerece en absoluto la intensa batalla en cabeza de la flota. El cambio de líder en la clasificación de las 14h es un ejemplo de ello. Yoann Richomme (IMOCA Paprec Arkéa) aventaja ahora en sólo 15 millas a Charlie Dalin (MACIF Santé Prévoyance).

Hacia un final incierto
Para los primeros barcos IMOCA, la partida está lejos de haber terminado y el suspense se mantiene intacto. "Los líderes mantienen bien sus posiciones, pero las diferencias son muy estrechas. Por otro lado, hay un poco de diferencia lateralmente. Es interesante porque Paul Meilhat (Biotherm), más al sur, todavía tiene una carta que jugar", observa Francis Le Goff, director de regata de la Transat CIC, que destaca la buena remontada de Sam Davies, 3º a 45

millas del líder en la clasificación de las 17:00 horas, y la velocidad de Damien Seguin (Groupe APICIL), el más rápido de la flota con 20,5 nudos en su corredera al comienzo de la tarde. O el hecho de que Boris Herrmann (Malizia - Seaexplorer) siga a la caza a pesar de una serie de problemas técnicos.

La suiza Justine Mettraux (Teamwork - Team SNEF), que fue penalizada anoche con 70 minutos por una infracción en el sellado del motor el primer día, y que por tanto ha perdido algo de terreno, se encuentra ahora en 10ª posición a unas 90 millas. "Anoche decidí penalizarme en la cresta de alta presión. Intenté encontrar un momento en el que no hubiera demasiado viento y en el que mis rivales no fueran demasiado rápido para no perder demasiado terreno. Por el momento, estoy bastante contenta con mi carrera y la lucha con mis competidores. Las condiciones han sido difíciles desde el principio, y así sigue siendo. Sobre todo, me estoy concentrando en mantenerme a mí mismo y al equipo a salvo y en navegar bien".
El patrón japonés Kojiro Shiraishi (DMG MORI Global One) se ha estado recuperando de un mareo y desde entonces mantiene un ritmo constante, con el objetivo de terminar para asegurar su clasificación para la Vendée Globe. Shiraishi es 18º, una posición por delante del italiano Giancarlo Pedote, que ha tenido que hacer frente a algunos problemas técnicos en su IMOCA PRYSMIAN.

El británico James Haryada (Gentoo Sailing Team) también ha tenido pequeños problemas, pero ha logrado mantener una excelente 20ª posición. "Todo va bien, pero tenemos un problema con el foil a babor, así que he perdido el control hidráulico del rastrillo. Creo que es una junta interna, que no voy a poder arreglar aquí. Creo que puede que no tenga el foil de babor para el resto de la regata, lo que no es nada bueno". El suizo-alemán Ollie Heer (Oliver Heer Ocean Racing) es 26º.

"Los IMOCA son los que más viento en popa tienen en este momento. Los primeros están empezando a salir. El viento debería amainar un poco. Los navegantes van a tener que izar algunas velas, realizar algunas maniobras y echar un segundo vistazo al barco antes de la fase final, sobre todo porque todo el mundo empieza a pensar que el final de la regata es incierto", explica el director de regata. Según él, "si no hay una brecha significativa al final de esta zona de vientos fuertes, el final de la regata promete ser muy interesante, ya que no sabemos realmente cómo se van a desarrollar las cosas en el último día y medio de regata", y podría haber algunos aires ligeros antes de llegar a Nueva York.

Los mejores Class40 están cruzando la cresta que los IMOCA atravesaron ayer, pero siguen manteniendo una buena velocidad media y probablemente se estén tomando su tiempo para revisar a fondo sus barcos.

Menos de dos millas separan al nuevo líder, Ian Lipinski (Crédit Mutuel), y a Fabien Delahaye (LEGALLAIS), que han ido intercambiando posiciones durante los dos últimos días en una lucha sin cuartel por el primer puesto. No obstante, deben tener cuidado con el italiano Ambrogio Beccaria (Alla Grande - Pirelli), que ha remontado y ahora es tercero a poco más de 9 millas, y con el líder inicial Nicolas d'Estais (Café Joyeux), cuarto. El campeón italiano de la Clase 40 2023, Alberto Bona (IBSA), que optó por una ruta más meridional, intenta encontrar un ángulo mejor para alcanzarle y reducir la diferencia de unas 67 millas. La única mujer Amélie Grassi (La Boulangère Bio) mantiene con seguridad su sexta posición por delante del antiguo ganador de la Vendée Gobe Vincent Riou (Pierreval - Fondation Good Planet) en su nuevo diseño Verdier de timón único.
En la clase Vintage, Patrick Isoard ha puesto más millas entre su Uship pour Enfants du Mekong y el FAIAOHAE de Rémi Gerin y está a punto de cruzar las 2.300 millas hasta el punto de llegada.
En las últimas 24 horas, el control de la regata ha sido informado de más daños y abandonos.
Clarisse Crémer se dirige a las Azores, a unas 500 millas, para una parada técnica en boxes tras descubrir un problema con el mamparo del J3 en L'Occitaine en Provence.
En la flota de Class40, Goulven Marie (QWANZA) ha desarbolado en las primeras horas de hoy, tras el abandono oficial de Quentin Le Nabour (Bleu Blanc Planète Location), Axel Tréhin (Project Rescue Ocean) ha chocado contra un objeto flotante y Aurélien Ducroz (Crosscall) ha informado de la rotura de un estay, ambos están evaluando la situación con sus equipos de tierra.