Portada ›› Vela ›› Solitarios y A2 ›› Calma y expectación a bordo del Estrella Damm con la regata al rojo vivo

Calma y expectación a bordo del Estrella Damm con la regata al rojo vivo

Calma y expectación a bordo del  Estrella Damm con la regata al rojo vivo

# Pepe Ribes y Alex Pella aprovechan la bajada de viento para hacer mantenimiento mientras valoran las posibilidades que se abren tras decisión del líder de hacer una escala técnica en Wellington
# Alex Pella: “Todos los barcos tienen desgaste y va a ser interesante ver si a los que paran les vale la pena o no perder las 48 horas de penalización”

La Barcelona World Race se pone al rojo vivo tras la decisión del líder de la regata, el Virbac Paprec 3, de hacer una parada técnica en Wellington (Nueva Zelanda), que conlleva la obligación de no zarpar de nuevo en 48 horas. La cuenta atrás ha empezado a las 11:11 hora española, momento en que el barco francés ha amarrado en puerto. Sus inmediatos perseguidores, los barcos españoles Mapfre y Estrella Damm, valoran las nuevas posibilidades que se abren con esta parada en boxes del barco de Jean Pierre Dick y Loïck Peyron, además de la anunciada escala del cuarto clasificado, el Groupe Bel.

“Será interesante ver si las 48 horas que pierden los barcos que van a parar valen la pena, según cómo salgan de allí, con viento o sin viento, y según las averías que tengan”, comentaba Alex Pella en videoconferencia. El patrón barcelonés del Estrella Damm reflexionaba: “Todos los barcos tienen desgaste y hay que saber valorar si vale la pena parar y perder 48 horas o seguir y saber que estás un poco más mermado o que puedes tener más problemas técnicos. La verdad es que está muy interesante, y hay mucha gente que no acaba de decidir si para o si no para. Va a ser como la parada en boxes de las carreras de Fórmula 1: quién mete más gasolina y quién cambia neumáticos…”

El Estrella Damm, tercer clasificado, se encuentra inmerso en una zona de calmas provocadas por el anticiclón situado en el mar de Tasmania, de la que los patrones esperan salir conforme éste se desplace al este. Pepe Ribes y Alex Pella han aprovechado esta situación para reducir el lógico desgaste de la embarcación al que se refería Pella: “Por ejemplo, hoy nosotros hemos estado encalmados y hemos estado casi todo el día ocupados con temas de bricolaje: hemos reparado dos velas, candeleros, el balcón de proa, un winche… hemos estado todo el día dedicados al barco, sabiendo que va a haber pocas oportunidades de calma y que puedes ir a proa a hacer una reparación, etc. Sobre todo en cuanto a velas: hemos reparado dos velas en cubierta, lo que es un lujo porque tienes espacio, ya que hacerlo dentro del barco es muy complicado”.

Pella se mostraba muy satisfecho de haber llegado a las antípodas en tercera posición y en buena forma a pesar de empezar a acusar el inevitable cansancio: “De momento en cuanto a clasificación y la forma de navegar lo estamos llevando bastante bien y esperamos seguir así lo que queda de regata”.

La regata solidaria: una milla, una sonrisa

La videoconferencia de hoy fue muy especial para Alex Pella, ya que contó con la presencia de Alejandra Bonet y Neus Raig, representantes de la Fundación Pequeño Deseo. El patrón barcelonés colabora con esta organización, dedicada a cumplir los deseos de los niños con enfermedades crónicas o de pronóstico grave, haciendo su tratamiento más llevadero. A través de la web http://www.migranodearena.org/AlexPella1 , Pella trata de convertir las millas que recorre en apoyos que traigan sonrisas a estos niños.

Bonet y Raig explicaron a Pella los diversos deseos que se han cumplido desde que se inició la regata, como una visita al entrenamiento del FC Barcelona, en que los niños pudieron conocer a sus ídolos futbolísticos: “Está funcionando muy bien, también vamos a toda vela, como vosotros”, aseguró Raig a Pella.

El patrón animó al público a que siga colaborando con sus donaciones: “Queda media vuelta al mundo todavía”, recordó. Pella deseó que su regata pueda inspirar a muchos: “Que nos sigan mucho, que vean que es una regata en que cada día es una prueba distinta que tienes que superar; que es una aventura enorme, grandísima, como lo es la vida y como es aprender a superar todas las pequeñas situaciones que te marca el día a día. Esta regata va en paralelo a la vida diaria, pese a que es algo más duro porque estamos todo el día sometidos a mucho esfuerzo y mucho estrés, pero son pequeños pasitos que tienes que ir dando”.

Pella quiso concluir la conexión mandando un cálido saludo a todos los niños a los que apoya la Fundación Pequeño Deseo: “Espero de verdad que se puedan cumplir los deseos de todos ellos”.