La decisión no fue fácil de tomar, pero Sebastien Josse ha tenido que hacer frente a los hechos. Con un timón roto no puede seguir en la Vendée Globe y pone rumbo a Nueva Zelanda, probablemente Auckland. .

El gran Sur tiene otra victima. Con las crucetas de su palo fuera de combate, el canadiense Derek Hatfield se dirige a Hobart. Marc Guillemot este sábado noche ha dejado su fondeo en las Islas Auckland después de una exitosa reparación en el carril mástil, Dominique Wavre llegó a 0,30 (HF) domingo de Fremantle y Michel Desjoyeaux aumenta la brecha sobre todos sus adversarios en el paso de la puerta del Pacífico Occidental.

Sebastien Josse tendrá que esperar hasta la primera luz del día para hacer una evaluación completa a su BT diseñado por Farr después de haber sido golpeado por una gran ola y volcar durante las horas de oscuridad. Esto es parte de la é`pica de la Vendée Globe, los 40 rugientes siguen fieles a su fama. Hace cuatro años el día de hoy, día de San Esteban, Josse conseguía reiniciar la marcha, después de pegar un growler el 23 de diciembre.

La depresión de Nueva Zelanda, que pasó por la cabeza de la flota en el Día de Navidad, ha redistribuido las cartas:

Unai Basurko ha estado presente vía conferencia telefónica en este acto

Las condiciones meteorológicas tienden a deteriorarse en las próximas horas y la víspera de Navidad es probable que para casi la totalidad de la flota de la Vendée Globe, sea muy agitada, una nochebuena... verdaeramente mala. Y si Michel Desjoyeaux sigue en cabeza, sus perseguidores no pierden el tiempo y liman millas de diferencia como cohetes.

Tomados los tiempos del paso por la longitud del Cabo Leeuwin, la flota confirma su estiramiento en longitud debido a las condiciones encontradas en el Océano Índico. Los solitarios navegan por parejas en el momento que el líder se acerca al antéméridien, separadas más de 4000 millas ...

En menos de veinticuatro horas, los líderes cruzarán la línea del meridiano de 180. En cabeza, Michel Desjoyeaux controla a sus tres perseguidores mientras que el resto de la flota se prepara para una fuerte galerna.

En este 42 º día de regata los galgos de cabeza de la Vendée Globe han pasado la mitad del recorrido. Mitad de millas, no significa mitad de tiempo en esto de la vuelta al mundo a vela, sin escalas ni ayudas. Restan 11.851 millas de mar, un tercer cruce del océano, que a veces de Pacífico tiene el nombre solamente. Cuando estén en la mitad de este desierto líquido, los marinos tendrán 2000 millas a cualquier tierra habitada. Remontar Cabo de Hornos, el cabo de las tormentas, donde el mar hierve, frontera simbólica que marca el final de la epopeya del sur, y por último, la subida del Atlántico que puede deparar de todo.

Alta participación en una temporada que registró 117 embarcaciones de toda la comunidad gallega