El equipo de Pepe Ribes y Alex Pella roza el podio tras salir último en la tercera etapa de la Vuelta a España a Vela
La embarcación demuestra su gran potencial con vientos portantes. marca un pico de velocidad de 30 nudos y se acerca al podio en la general
El Estrella Damm ha protagonizado una magnífica remontada en la tercera etapa de la Vuelta a España a Vela, de 220 millas entre Gijón y Sanxenxo. Saliendo en último lugar debido a una penalización por salida prematura, el barco de Alex Pella y Pepe Ribes fue remontando hasta el cuarto puesto en el paso puntuable por Finisterre, y rozando el podio en una emocionante y ajustada llegada a Sanxenxo cuerpo a cuerpo con el W Hotels-Nova Bocana. El Estrella Damm cruzaba la línea a las 05:48, apenas 5 minutos después que su rival. Con los resultados de hoy en el paso puntuable y en el final de prueba, el Estrella Damm sigue quinto pero ve como el podio se acerca a la vez que se distancia de sus perseguidores. El tercer clasificado, el W Hotels-Nova Bocana, suma 12 puntos frente a los 16 del Estrella Damm (la puntuación es a la baja, el primero de cada etapa suma un punto, el segundo, dos…), mientras que el Movistar, cuarto clasificado, tiene 13,5 puntos. Además, según la Dirección de Regata, el Estrella Damm ha marcado el pico más alto de velocidad de la flota a su paso por Finisterre, con 30 nudos.
Alex Pella, patrón del Estrella Damm demostraba su satisfacción a su llegada a puerto: “Estamos contentos porque es la primera vez que remontamos en esta competición. Lástima que a la salida hemos tardado en volver a tomar la línea. En realidad no creíamos que habíamos pasado antes de tiempo, y al volver teníamos a la flota por en medio, lo que nos ha ralentizado más. Luego, como ceñir (navegar contra el viento) nos cuesta, se nos han escapado mucho los otros barcos”, explicaba el patrón barcelonés.
En ese momento el equipo se desmoralizó un poco, como admite Pella: “Veíamos que los barcos que corrían más que nosotros en ceñida se nos escapaban cada vez más”. Sin embargo, la tripulación, formada por Pepe Ribes, Alex Pella, Olivier Douillard, Rubén Castells y David Pella, no desfalleció. Continuó en la pelea y cuando el viento permitió navegar con ángulos más abiertos el Estrella Damm demostró su potencial, recuperando posición tras posición.
Por su parte, Pepe Ribes afirmaba sentirse muy satisfecho con la progresión del barco y con la remontada. El patrón alicantino destacaba el tramo desde Estaca de Bares, cuando han optado por subir el spinnaker antes que el resto de la flota, aun forzando un poco de través, y han ganado al resto por velocidad: “Ahí hemos recortado una barbaridad”, subrayaba.
Pella destacaba la lucha contra su barco “gemelo”, el W Hotels-Nova Bocana, al que casi alcanzan en la bajada de Finisterre a Sanxenxo . “Estamos contentos porque íbamos comiéndoles terreno en la empopada por primera vez desde que competimos contra ellos”. Los cambios aplicados al barco han surtido efecto, como explicaba el director de equipo Jan Santana: “Hemos probado un spinnaker un poco diferente del que teníamos, y hemos ganado un poco de superficie de vela, además de que el barco viene a esta regata un poco más ligero que en el récord entre Nueva York y Barcelona”.
El Estrella Damm mira hacia el futuro con optimismo y con todas las opciones abiertas, antes de afrontar la cuarta etapa, la más larga de la Vuelta a España, que sale el lunes de Sanxenxo hacia Calpe. Pepe Ribes, natural de Benissa y socio del Real Club Náutico Calpe, volverá a casa en esta etapa, y aun a falta de previsiones más cercanas, adelantaba que será una prueba dura: “Con un poco de suerte podremos hacer muchas millas en popa pero en el Mediterráneo sufriremos un poco. Lo importante es estar cerca de nuestros principales rivales”.