La medalla de oro de Cristian Toro, ya está en Galicia

A las 9:00 de la mañana llegaban al aeropuerto de Lavacolla en Santiago de Compostela los cuatros piragüistas olímpicos, gallegos encabezados por el medalla de oro Cristian Toro. Teresa Portela, Rodrigo Germade, y Oscar Carrera llegaban a Santiago con un prestigioso y merecido diploma olímpico arropando al lucense que enseñaba radiante de felicidad su flamante presea.

Nada más aterrizar los cuatro palistas se dirigían al Pazo de Raxoi en la plaza de Obradoiro donde se iba a celebrar la recepción por parte del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo a los 16 deportistas de todas las modalidades que representaron a Galicia en los juegos olímpicos de Río 2016.

Dicho acto lo habría Cristian Toro agradeciendo el apoyo recibido desde que llegó a España con la medalla. Le daba paso al titular de la Xunta que dijo: “Con una medalla de oro y 7 diplomas, enseñáis al mundo que Galicia está en mejor forma que nunca. Y sois también un ejemplo a seguir para todos los gallegos, para seguir construyendo Galicia”

Después de la foto de rigor con todos los asistentes, Toro atendió a los medios a los que dijo: "Todavía no termino de asociar mi imagen a lo que es un campeón olímpico. Necesito estar unos días con mi gente, volver a ver la carrera un par de veces y las imágenes de los Juegos para situarme mejor, porque aún no he asimilado lo que hemos logrado".

Por otro lado, Teresa Portela declaró que de momento no piensa en su retirada, ya que no ve que le llegase el momento de dejar la práctica del deporte que tantos éxitos le dio. Acabando de aterrizar lo único que piensa es en cogerse unas merecidas vacaciones en las que disfrute de su familia, para luego ver los nuevos objetivos que se marca en su carrera deportiva. Portela haciendo gala de su humildad volvió a remmorar la carrera de la final, en la que recordó que las deportistas que le ganaron “lo hicieron porque son mejores y nada más”

Rodrigo Germade y Oscar Carrera del Club Náutico Betanzos quintos en estos juegos valoraron positivamente el puesto alcanzado y ya piensan en un nuevo ciclo olímpico en el que tendrán que adaptarse a la nueva distancia de K4 500 metros en la que se competirá en los juegos de Tokio 2020.