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Rescatan a dos pescadores depotivos tras hundirse su motora en Sanxenxo

Una embarcación del Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) rescató en la madrugada de ayer a dos pescadores deportivos después del naufragio de su motora, que ocurrió cuando se encontraba a la altura de punta Areas, en Sanxenxo, a la entrada de la ría de Pontevedra.

Los dos hombres estaban bien, según señalaron desde Salvamento Marítimo, y fueron trasladados al puerto de Combarro, en el municipio pontevedrés de Poio.

El suceso ocurrió cuando la motora Ferban Uno, una embarcación destinada a la pesca deportiva, se encontraba en la boca de la ría de Pontevedra. Los tripulantes descubrieron que la embarcación tenía una vía de agua cuando se hallaban a una milla de la costa de Sanxenxo. Ante esta circunstancia, dieron la alerta al servicio de emergencias gallego, el 112, que transmitió el aviso de la incidencia a Salvamento Marítimo pasadas la una y media de la madrugada.

 

La entrada de agua en la Ferban Uno fue rápida y sus dos tripulantes no pudieron evitarla, por lo que ante el riesgo de que se fuese al fondo, decidieron ocupar la lancha neumática de la motora y separarse de la embarcación siniestrada para aguardar en la auxiliar la llegada del equipo de rescate.

 

Fuentes de Salvamento Marítimo señalaron que se movilizó en un primer momento a la Salvamar Mirach, pero que en las cercanías se encontraba también una lancha del Servicio de Vigilancia Aduanero, que se pudo aproximar primero a la embarcación neumática en la que se encontraban los dos pescadores deportivos.

 

Tripulantes ilesos

 

El rescate se dio por finalizado sobre las dos y media de la madrugada, después de que la lancha del SVA llevase a los dos hombres, vecinos de los municipios pontevedreses de Poio y Soutomaior, hasta el puerto de Combarro para su desembarco. Según señalaron desde Salvamento Marítimo, los dos implicados en el suceso estaban aparentemente en buen estado físico e ilesos.

 

Por su parte, el operativo de rescate no pudo hacer nada por la Ferban Uno. La cantidad de agua que entró por la vía en su casco fue demasiada para la estabilidad de la embarcación, que acabó hundiéndose en la ría. Una portavoz de Salvamento Marítimo manifestó ayer que el naufragio no ha supuesto ninguna incidencia en la navegabilidad de la ría pontevedresa.

 

La motora está hundida a una distancia de unos 20 metros de profundidad. En este sentido, todo parece indicar que no habrá ningún operativo de reflotamiento de la motora siniestrada, una decisión que en último término le correspondería a su propietario. Desde Salvamento Marítimo se precisó que en caso de que se intentase el rescate del Ferban Uno, el coste lo asumiría su dueño.