El IEO lidera un despliegue científico sin precedentes para evaluar el estado de recursos pesqueros y ecosistemas vulnerables en los grandes bancos de Terranova.

El Estudio se realizará a bordo de buques de la Secretaría General de Mar, y es un esfuerzo internacional en el que participan investigadores de Canadá, Rusia, Reino Unido y Portugal, entre otros países.
Científicos del IEO, a bordo de los buques oceanográficos Vizconde de Eza y Miguel de Oliver, pertenecientes a la Secretaría General del Mar (SGM), desarrollarán durante tres meses dos campañas oceanográficas simultáneas, en las que se estudiarán mas de 10.669 km cuadrados del fondo marino y se realizarán en torno a 450 lances de pesca.

Vigo 22 de mayo de 2009. El próximo 24 de mayo zarpará de Vigo rumbo a Canadá el buque oceanográfico Vizconde de Eza, perteneciente a la Secretaría General del Mar (SGM), con el objetivo de evaluar el estado de las especies comerciales en los caladeros de Terranova, y el pasado sábado 16 de mayo partía de Vigo, con idéntico destino, el buque oceanográfico Miguel Oliver, con el objetivo de localizar hábitats bentónicos sensibles y evaluar sus posibles interacciones con la actividad pesquera. Estas campañas, que terminarán a finales de agosto, se desarrollarán paralelamente en el área de regulación de la NAFO (Organización intergubernamental para la investigación y gestión de las Pesquerías del Noroeste Atlántico), en los límites de la zona económica exclusiva de Canadá, y suponen un esfuerzo científico sin precedentes.

La serie de campañas que realizará el Vizconde de Eza, dedicadas a evaluar la salud de los stocks pesqueros, comienza con Platuxa 2009. Esta campaña, la decimoquinta que
realiza el IEO en estas aguas y la novena a bordo del Vizconde, está dirigida por el Equipo de Pesquerías Lejanas del Centro Oceanográfico de Vigo del IEO, que tiene como especies objetivo el fletán negro (Reinhardtius hippoglossoides), la platija americana (Hippoglossoides platessoides), la limanda amarilla (Limanda ferruginea), el bacalao (Gadus morhua), la gallineta (Sebastes spp), el mendo (Glyptocephalus cynoglossus), el granadero (Macrourus berglax), el perro (Anarhichas sp), la raya (Amblyraja radiata), el tiburón negro (Centroscyllium fabricii) y el camarón boreal
(Pandalus borealis), y que se desarrolla en las divisiones 3N y 3O del área de regulación de la NAFO (Figura 1) entre el 31 de mayo y el 21 de junio.

Seguidamente, del 21 de junio al 23 de julio, en el mismo buque y con los mismos objetivos, se desarrollará la campaña Flemish cap 2009, que será la vigésimo segunda
en el área del banco del mismo nombre (división 3M del área NAFO), y cuya finalidad será estimar la abundancia de las poblaciones de peces demersales y analizar la
estructura y diversos parámetros biológicos de las especies más importantes. Además del IEO, en esta campaña participarán el Instituto de Investigaciones Marinas de Vigo
(IIM-CSIC, jefatura de campaña) y el Instituto de Investigaçáo das Pescas e do Mar de Portugal (IPIMAR).

Para terminar de cubrir el área en la que la flota española desarrolla su actividad, el 24 de julio, a bordo también del Vizconde de Eza, se desarrolla la campaña Fletán Negro, que viene desarrollándose desde 2003 en la división 3L del área NAFO, y que incluirá una segunda fase en la que se muestreará en aguas de la zona económica exclusiva canadiense gracias a un acuerdo entre la SGM y las autoridades de este país. Con la finalización de esta campaña el 21 de agosto, el Vizconde de Eza habrá realizado 450 lances de pesca y recogido miles de muestras y datos que servirán para evaluar los recursos de los grandes bancos pesqueros de Terranova y poder, gracias a su análisis, asesorar en su gestión a las autoridades competentes.
Esta serie de campañas es financiada por la Comisión Europa en el marco del Programa Nacional de Datos Básicos.

Paralelamente, a bordo del buque oceanográfico Miguel Oliver, perteneciente también a la SGM, se desarrollarán tres campañas oceanográficas en el mismo área para localizar
ecosistemas vulnerables amenazados por las prácticas pesqueras que puedan ser susceptibles de protección. En este Proyecto internacional en el que también participan
científicos canadienses, rusos e ingleses, se estudiará la geomorfología de los fondos en busca de estructuras singulares, como montes submarinos o fuentes hidrotermales, que
puedan albergar este tipo de hábitats, se muestrearán los fondos y se tomarán fotografías de invertebrados como corales de aguas frías, esponjas o gorgonias.
El IEO, que cuenta con la experiencia adquirida en los proyectos ECOVUL y ATLANTIS desarrollados con los mismos objetivos en el Banco Hatton y la Plataforma
Patagónica respectivamente, dirigirá una de las tres campañas. NEREIDA surge como una respuesta necesaria a una aproximación ecosistémica del estudio de los recursos
marinos en el área NAFO. La información derivada de estas campañas será muy útil para tener una imagen integrada y completa del ecosistema, permitiendo identificar de
un modo preciso aquellas zonas candidatas a proteger y cumplir así con los requerimientos de la Asamblea General de Naciones Unidas, que en una resolución de
2004 instó a actuar a los Estados con carácter de urgencia respecto a las prácticas pesqueras destructivas que ponen en serio peligro los ecosistemas marinos vulnerables en alta mar.

El Instituto Español de Oceanografía (IEO) es un organismo público de investigación (OPI), dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación, dedicado a la investigación
en ciencias del mar, especialmente en lo relacionado con el conocimiento científico de los océanos, la sostenibilidad de los recursos pesqueros y el medio ambiente marino. El
IEO representa a España en la mayoría de los foros científicos y tecnológicos internacionales relacionados con el mar y sus recursos. Cuenta con una plantilla
aproximada de 600 personas y su presupuesto supera los 60 millones de euros. Tiene nueve centros oceanográficos costeros, una estación de biología pesquera, cinco plantas
de experimentación de cultivos marinos, 12 estaciones mareográficas, una estación receptora de imágenes de satélites y una flota compuesta por seis buques
oceanográficos, entre los que destaca el Cornide de Saavedra, de 68 metros de eslora. En la actualidad están en construcción dos nuevos buques de 46 metros de eslora y en
proyecto un tercero de 90 metros de eslora.