XVII Torneo Internacional de Pesca de Altura al Curricán Benalmádena 2011
Ni la llegada de un temible Levante, quitaron las ganas de competir al centenar de deportistas que se dieron cita en el XVIII Torneo Internacional de Pesca de Altura al Curricán de Benalmádena…
Reunión de patrones
El primero de los actos públicos comenzó pasadas las 20:30 horas, y contó con la presencia de Salvador González, vocal; Salvador Peinado, gerente del puerto;; Francisco Carrión como juez y asesor técnico de la prueba; Francisco Salido, primer Tte. de Alcalde del Ayuntamiento de Benalmádena, y José Manuel López, en calidad de secretario del Consejo de Administración del Puerto.
Tras los distintos saludas de las autoridades agradeciendo la presencia de los pescadores, se entró de lleno en materia y se habló de la pesca, del tiempo, de las normas y de las novedades, así como de los cambios de algunos apartados del reglamento en función de la zona de pesca, la actividad de los peces y las previsiones climáticas.
Se aprobó adelantar una hora la salida en ambas jornadas, sin fijar el momento de lanzar líneas al agua, debiendo estar en puerto a las 19 horas el sábado y a las 18 horas el domingo. También se permitió el uso de hasta 7 cañas en acción de pesca, siempre con un mínimo de cuatro licencias de pesca y federativas a bordo; el uso de equipos desde 30 hasta 80 libras. Se amplió la hora límite de pesaje, aunque no tuviese repercusión, y se prohibió embarcar atunes, escualos y peces espada bajo ningún concepto.
En cuanto a las previsiones climáticas, todos estaban pendientes de la llegada de fuertes vientos de Levante, probablemente con fuerza 4 y 5, y se preparaban para afrontar una dura jornada de pesca, sobre todo si se empecinaban en navegar a los pesqueros ubicados más allá del veril de los mil metros, esto es, a más de 18-20 millas del puerto de Benalmádena. Lo cierto es que la tarde del viernes fue muy tranquila, con oleaje moderado en las playas y con un ligero magón, pero muy lejos de las previsiones.
En la reunión de patrones se propuso incluso retrasar la salida de forma premeditada hasta mediodía, algo que no puede hacerse hasta que oficialmente llega el momento de dar la salida, y en ese preciso instante la mar estaba como un plato en el cajón costero de las primeras 15 millas, una distancia razonable para el desarrollo de una prueba de pesca de altura al curricán. El caso es que varios programas de previsión apuntaban ligeras mejorías y aún temiendo una mala jornada todos tenían mucha ilusión por comenzar. Minutos después terminaba la reunión y comenzaba un excelente pic-nic frío en el que no faltaron toda clase de embutidos, anchoas, lomo en manteca, cerveza, vinos y refrescos, un pic-nic que se alargó más allá de las 23 horas y que puso de manifiesto la excelente complicidad y cordialidad que existe entre todos los participantes y los miembros de la organización, tantos los nuevos como los más antiguos, destacando la presencia de Fernando Rodríguez, al frente de la prueba desde sus comienzos.
Primera manga
A las 07:55 horas habían tres barcos en bocana esperando el inicio oficial de la competición; el Macumar II, el Embrujo II y el Giraldillo, quien tuvo un pequeño problema técnico y tuvo que retrasar unos minutos su salida. Muchos esperaban la salida de estos barcos para conocer con seguridad como estaban las aguas por dentro, ya que tanto uno como otro son destacados deportistas y además de puntuales para salir navegan rápido en busca de los veriles. Lo importante es que no paran de reportar cómo está la mar, el viento, la temperatura del agua, etc, y son la guía para otros barcos de menos envergadura. Gracias a esa información a las 8:30 horas casi todos estaban fuera, y a las 10 de la mañana solo faltaba por salir el Macarena, de José L. Soto, quien tuvo que acudir a una clínica con serios problemas por parte de su esposa a quien le deseábamos una pronta recuperación.
Bajo el aspecto de la pesca y las técnicas, la estrategia era simple; barrer el Mediterráneo por amplias zonas buscando averíos de pájaros, algarines o sardinas, para tentar a los túnidos, carángidos o escómbridos, o pelágicos aislados como el marlin blanco, la aguja imperial o el dorado. Plumas, kona heads de varias medidas, pulpitos, combinaciones y sobre todo minnows de tamaño regular (menos de 25 cm de longitud), ya que además del dorado las albacoras también suelen mostrar interés. Pero nada de eso, al menos en las primeras horas, y eso que había un gran nivel. En efecto, casi todos los participantes han ganado varias competiciones y además manejan equipos de lo más fino y sutil, pero sobre todo, trabajan con una gran experiencia, por eso se hacia raro ver que las capturas tardaban en llegar.
A media mañana el estado de la mar, siempre dentro del cajón de las 20 millas, era excelente, pero las capturas no servían a pesar de que se cantaron varios combates, siempre listados inmaduros… Por otro lado, los patrones del Dos Ana Dos y el Embrujo Segundo tenían algo en común; celebraban su santo (San Bernardo) y querían celebrarlo con una buena clasificación.
Cerca de la costa las aguas eran azules, pero el magón del viernes las enturbió y enfrió ligeramente, ya que en días anteriores estaban a 25º C. Ahora seguían a la misma temperatura, pero la actividad había decaído bastante y se veía reflejado en los resultados; a las 16:00 horas solo había una captura válida, la que embarcó Antonio Mora, patrón del Salamora, a las 14 horas. Pero antes había sido el Willy quien dio la nota desde su Dos Ana Dos, ya que perdió un buen dorado con unos 7 u 8 kilos. Teniendo en cuenta que era su santo, fue un duro castigo.
A las 16:30 horas teníamos dos barcos en combate, uno de casi media hora… Era Willy desde el Dos Ana Dos, y Alberto, desde el Macumar, pero Willy lo perdía. El pez, muy grande pero sin identificar, logró abrir el anzuelo y huir. Una pena. Alberto tuvo más suerte, y es que desde que embarca a su tripulación femenina no hay quien le tosa… Antes de las 17:00 horas lograba embarcar dos listados reglamentarios, por tanto ya se podían establecer algunos puestos en las dos clasificaciones; sin pasar por la báscula iba primero en el mayor peso total y segundo en la pieza mayor, mientras que el Salamora era líder de la pieza mayor. Pero aún faltaban dos horas de pesca y los peces parecían activarse, pues la siguiente captura válida se la anotaba el Giraldillo, de Plácido Antequera, a las 17:10 horas; se trataba de un listado de más de cuatro kilos. Pero solo fue eso, la última pieza de la jornada, ya que minutos después todos seguían pescando al curricán pero camino de puerto, a donde llegaron entre las 18:15 y las 18:55 horas, concluyendo una jornada más sin ningún tipo de incidencia.
A las 19:00 horas se abría el pesaje y los turistas y muchos curiosos locales se dieron cita alrededor para ser testigos de las hazañas de los pescadores deportivos, que aunque presentaron un pobre balance, era indudable que pusieron un gran empeño y mucha experiencia en juego, ya que las cosas estuvieron difíciles. De cualquier forma los premios más importantes ya estaban distribuidos, así que las capturas no desmerecieron la labor de sus captores… Los dos viajes para dos personas a Centroamérica ya estaban adjudicados, aunque podían cambiar de dueño puesto que faltaba toda una jornada…
XVIII TORNEO INTERNACIONAL DE PESCA DE ALTURA AL CURRICÁN
Mayor Peso Total - Clasificación General Provisional
Pos. Barco Patrón Piezas Peso
1º Macumar II Alberto Vázquez 2 6,7 kilos
XVIII TORNEO INTERNACIONAL DE PESCA DE ALTURA AL CURRICÁN
Pieza Mayor – Clasificación General Provisional
Pos. Barco Patrón Especie Peso
1º Giraldillo II Plácido Antequera Listado 4,45 kilos
2º Salamora Antonio Mora Dorado 4,40 kilos
3º Macumar II Alberto Vázquez Listado 3,50 kilos