Segunda jornada salmonera en Asturias, segundo capote general
La segunda jornada de la campaña de pesca del salmón se cerró como la primera, cero patatero. Los precintos volvieron a tener un día de absoluto descanso. Riberas muy animadas y ríos con buen tono. Pocos bichos se avistaron, por aquello del veo veo, solo en el Sella, en concreto en el coto Cañeras.
El salmón fue visto anteriormente en el coto Tempranas, sin duda va río arriba. Tempranas y Cañeras son dos cotos muy próximos. Si el pez ha cogido postura y opta por no seguir corriente arriba no sería estraño que algún conocido caña asturiano hiciese tocar las campanas.
Las demás riberas, tuvieron notable asistencia de sedales, anzuelos y cañas.
En el Eo se ocupó un 50 por ciento de los cotos, y pescadores en los tramos libres en un día soleado,y con buen estado del río. La jornada, como la del domingo, con decepción, sin lances positivos.
En el Esva, más animación por la mañana que por la tarde. El prolífico coto de Piedra Blanca estuvo ocupado, pero sus titulares no vieron ejemplar alguno y volvieron de vacío.
En cuanto al Nalón, los ribereños apuntaron que "será difícil pescar un salmón porque el río baja con mucha riada" y si se captura "será en la parte baja, de La Cerezalina y La Figal para abajo", manifestaron. "No entiendo muy bien lo que pasa en el Nalón". "Desde que abrieron la veda, hace tres o cuatro años, igual en mayo ves algún salmón por la zona de San Román, pero vas a pescar y no sale ni uno", apuntan.
En el Narcea tras la suelta de agua a media mañana desde la presa de Calabazos, no facilitó las cosas para los pescadores. En los cotos la ocupación fue baja, mientras que de los tramos libres el que tuvo mayor aceptación fue el de Puente Quinzanas. También estuvo animado el propio embalse de Calabazos, donde se vio a bastantes aficionados a la trucha.
En el Sella la ocupación de cotos fue buena, un 80 %, mientras que en las zonas libres hubo menos animación.
En el Cares, algo menos gente que en la apertura.
Cares y Sella bajan con un caudal muy pescable.
Los menos pesimistas no conceden demasiada importancia a estas dos jornadas en blanco en pleno arranque de la temporada y advierten que hubo años en los que el primer salmón tardó más de una semana en salir. Sin embargo, ello no ha impedido que la decepción haya cundido entre los ribereños, después de que las excelentes condiciones del Sella, con un nivel "perfecto" para la práctica de la pesca del salmón, les hicieran presagiar un campanu tempranero, una primera captura que ya llegó en la vecina Cantabria, y más en concreto en el río Nansa. Por el momento en Asturias no queda más que esperar.