Los caladeros de pesca noruegos amenazados por emisiones de dióxido de carbono
Según una reciente investigación, algunos de los caladeros más importantes del hemisferio Norte están siendo amenazados por el aumento de emisiones de dióxido de carbono,
Científicos del Centro de Estudios Climáticos de Bjerknessenteret, en Noruega, han descubierto que el CO2 en el agua es tan fuerte que el agua de mar se está volviendo ácido y, como resultado, la vida marina en gran parte de la costa noruega está en riesgo.
El periódico Norway Post señala que esto puede tener graves consecuencias para los crustáceos y moluscos noruegos y también para las barreras de coral, puesto que la acidez disuelve las conchas de los moluscos y crustáceos, como asimismo los esqueletos de las barreras de coral, lo que a la vez tendrá nefastas consecuencias para el bacalao, cuyo hábitat se encuentra en las barreras de coral.
“El proceso del aumento de la acidez del agua del mar está ocurriendo con más rápidamente en las regiones del Ártico que en otros lugares”, comentó el científico Richard Bellerby del Bjerknessenteret.
Debido a que el agua fría absorbe más CO2, el agua de mar se vuelve más ácida. Esta amenaza medioambiental a la biomasa de peces es un tema que está causando alarma en Noruega, donde las comunidades de pescadores han efectuado campañas en contra de los efectos de la expansión de exploración para descubrir yacimientos de petróleo y gas.
Los grupos medioambientalistas están preocupados por la amenaza de cambio climático por el “efecto invernadero” causado por las emisiones de gases industriales tales como el dióxido de carbono.
Este gas se puede disolver en el agua de mar pero esto ocurre de manera relativamente lenta. Bombear el gas a las profundidades del océano es una manera de reducir la amenaza del “efecto invernadero”.
Algunos investigadores creen que el problema está causando los cambios más dramáticos en la química marina de los últimos 500 mil años y es una amenaza a los cardúmenes peor que la sobrepesca.