El campano del Ulla cae en Sinde en una jornada con cinco capturas

Hizo dos lances desafortunados. Al tercero, cayó el primer salmón, un ejemplar salvaje, hembra, sin el microchip que identifica a los peces de las campañas de repoblación, de 5,918 kilos de peso, de 84,7 centímetros de longitud y cuya tonalidad oscura indica que ya llevaba al menos un mes en el río. "Fue llegar y, en el tercer lance, besar el santo", admitía el afortunado ribereño, campeón gallego de surf casting (pesca con caña en el mar) en el año 2004. El bicho presentó cerca de 10 minutos de pelea. Finalmente, este deportista –que se define como "un pescador novel" porque apenas lleva diez años pescando, gracias a la afición que le contagió su hijo– logró hacerse con el codiciado "campanu", que le ayudó a extraer del río con la "sacadeira" el pescador de Valga José Luis Guimarey López, otro de los 6 afortunados deportistas que ayer tenían un puesto en el coto de Sinde.

Solo uno de ellos no logró ninguna captura al cabo del día. Los otros 5 pescaron los 5 primeros salmones de la temporada con cucharilla. El segundo sucumbió ante Guimarey, al que "Sergio" asistió con la "sacadeira" dejando el puesto al que había regresado para seguir pescando trucha y reo tras entregar el primer salmón de la temporada a los agentes medioambientales para que lo pesasen y lo midiesen. Idéntico proceso pasó el segundo salmón de la jornada, un ejemplar salvaje y macho, de 8,128 kilos de peso y 87 centímetros mucho más plateado, lo que indica que acaba de llegar del mar. Guimarey no tenía ayer claro cómo lo cocinará. "Se lo enseñaré a mi mujer. Yo soy pescador. Comerlo ya es otra cosa", dijo porque, para su gusto, el salmón es un "pescado muy fuerte".

En cambio, "Sergio" sí que tenía claro cómo lo disfrutará: "con los amigos y con la familia, a la plancha, en filete, como más rico y jugoso está".

Las alegrías de la mañana no se detuvieron ahí. La tercera se producía a las 11.30 horas también en Sinde. El joven Pedro Toucedo Iglesias, de Vigo, capturaba un ejemplar salvaje de 5,793 kilos y 75,5 centímetros.

El cuarto ejemplar caía a las 11.45 horas. Luis Moirón García de A Pontenova (Lugo) pescaba un salmón salvaje de 4.892 kilos y 76,5 centímetros. Estos cuatro primeros ejemplares picaron en la zona de la presa de Sinde, O Carballo. En la denominada playa de Sinde caía a las 17.25 horas el quinto. Lo pescó Joaquín Iglesias Álvarez, de 50 años y vecino de Vigo. Pesó 6,367 kilos y midió 83 centímetros.

Critican la apertura de un tramo de río en Cira vedado hasta ayer y en el que picaron varios "pintos" de salmón

Con la apertura de la temporada de pesca en aguas salmoneras también se abrió el tramo del Deza que desemboca en el Ulla a la altura de Cira. Llevaba cerca de una década vedado para favorecer a las crías de salmón. Varias de ellas – "pintos"– picaron ayer en este ámbito y fueron devueltas al río. Ello motivó las protestas que los pescadores más concienciados le hicieron llegar a los agentes medioambientales, coincidiendo unos y otros en que el tramo debería seguir vedado.

Por lo demás, la jornada transcurrió con normalidad. Todos los deportistas que tenían un puesto adjudicado en los cotos salmoneros acudieron a pescar. En Ximonde había 4 cañas; en Couso, al que ayer muchos llamaban "el coto maldito" por sus escasas capturas, 6; y en Sinde, otras 6. Aunque el río traía caudal abundante tras las recientes lluvias, la claridad de las aguas dificultaba más que otros días las capturas.

Capote en el Lerez
Tres pescadores abrieron ayer la temporada de pesca del salmón en el coto de Monte Porreiro, entre la presa de Monte Porreiro y la de Bora,l único habilitado en la cuenca del Lérez para la pesca del salmón e intentaron capturar el anhelado "campanu" del Lérez.

En total, son cinco las personas que están autorizadas cada día a pescar en el coto pontevedrés. De estos cinco privilegiados a los que se les concedió el turno para el primer día de la temporada, asistieron solo tres de ellos, dos vecinos de Ourense y un ribereño. A primera hora de la tarde de ayer, capote, pero los salmones ya habían dado señales de vida. Tras una fuerte picada, uno de los pescadores tuvo durante un buen rato al primer ejemplar de la temporada clavado pero la fortuna no estaba con el, se soltó.

En principio, la temporada que echó andar ayer permanecerá abierta hasta el 31 de julio, aunque podría finalizar antes si se alcanza el tope máximo de 8 capturas. Cada pescador solo puede obtener un ejemplar por jornada.

El número de solicitudes para pescar en este coto pontevedrés es bastante elevado, de tal forma que las cinco plazas diarias suelen estar cubiertas para todo el mes de mayo y parte del de junio.

La Xunta soltó casi un millón de alevines para repoblar el río

La Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Medio Ambiente, repobló en los últimos años varios ríos gallegos con más de un millón de juveniles de salmón en los últimos tres años. Uno de los ríos en los que se centraron sus esfuerzos fue el Lérez, en donde la situación de partida era peor que en otros cauces fluviales gallegos. Los resultados positivos se están detectando en una mayor subida de adultos de salmón en el otoño del pasado año que en años anteriores.

En el año 2009 también se inició un estudio de radio-seguimiento de salmones adultos en el río Lérez con el objetivo de estudiar la migración de esos peces una vez que entran en el agua dulce. Teniendo en cuenta los datos obtenidos en este estudio se tomaron medidas como la mejora de la accesibilidad del salmón a los tramos altos del río como la modificación de la escala y rampa de la presa de Monte Porreiro o abrir dispositivos de franqueo sencillos. Se redujo la mortalidad por pesca y se repobló con individuos de origen autóctona, juveniles salvajes de otros ríos gallegos que fueron trasladados a la piscifactoría de Carballedo para su estabulación hasta la fase de reproductores y obtener así embriones de salmón gallego para el Lérez. En los últimos años hasta 2011 se soltaron 850.000 alevines en el Lérez y el pasado año otras 125.678 crías más.