Asturias: Los biólogos aplauden que se acorte la temporada de pesca
30 noviembre 2009 08:15:00
Las normas aprobadas para la campaña de pesca de 2010 suponen un avance significativo hacia una gestión más conservacionista". Así lo explica Alfredo G. Nicieza, profesor de Biología en la Universidad de Oviedo y quizá una de las personas que mejor conozcan la especie en la región. Nicieza ve la nueva normativa como "una respuesta lógica ante el aparente colapso de las poblaciones meridionales de salmón atlántico".
David Alvarez, compañero de Nicieza en el departamento de Biología no lo tiene tan claro y es crítico con cuestiones como la pesca sin muerte, pero también cree que "era necesario que se hiciera una restricción tanto en número de capturas por pescador y de días de pesca a la vista de los resultados de los últimos años e incluso se podría haber planteado una veda de algunos ríos durante un tiempo".
Una de las cuestiones más aplaudidas por Nicieza es que, según explica, la reducción del periodo de pesca con muerte favorecerá que un mayor número de individuos participe en la reproducción del invierno de 2010 a 2011, lo que se traduce en una componente positiva en el reclutamiento de juveniles.
En este sentido, comenta que el hecho de reducir por delante la temporada sin muerte --entre marzo y mayo-- "se pretende proteger a una buena parte de los salmones que han pasado dos años en el mar y a la mayoría de los de tres años de mar", que son los que tienen un mayor valor reproductivo. Lo mismo pasa con el establecimiento de una talla máxima de 70 centímetros. "Si se reconoce el interés de preservar a estos individuos de tamaño superior a 70 centímetros hasta que se observe la recuperación de las poblaciones, la discusión sobre la reducción del periodo total de pesca ´con muerte´ no tiene sentido, -dice y añade-- ya que sólo a partir de mediados o finales del mes de mayo empieza la entrada masiva de salmones de un año de mar".
En cuanto a la pesca sin muerte, Alvarez manifiesta que "no creo que sea una panacea para el salmón" y añade que quizá lo más correcto hubiera sido haber prohibido la pesca durante esos días, "al menos en esta temporada". "Muchas veces los pescadores hablan de las molestias de las canoas del Sella, pero me imagino que prender un salmón durante media hora, aunque lo liberes después tiene que ser mucho mas estresante y molesto que ver pasar una piragua por encima", explica de forma gráfica.
Sea como sea, Alfredo G. Nicieza comenta que "lo esperable es que estas medidas tengan un efecto positivo sobre, ya que seguramente aumentarán las probabilidades de supervivencia hasta la reproducción de las hembras de mayor tamaño". De todas formas también concreta que "en caso de producirse, ese efecto positivo no se manifestaría hasta las temporadas de 2013, 2014 y 2015". Además, este biólogo explica que "tampoco sabemos si una veda total y la ausencia total de depredadores (algo que por otra parte es totalmente absurdo) serían suficientes, ya que quizás el problema más importante se encuentre fuera de los ríos y del ambiente fluvial".
Fuente: la Voz de Asturias