11.442 pescadores en busca del campanu
Estimar dónde se pescará el primer campanu del año es una tarea tan difícil como impredecible. La temporada de pesca en Asturias comienza mañana y los ribereños ya tienen sus cañas preparadas para lanzarse a la captura de tan codiciado salmón. Además, el Principado ha concedido este año para la temporada de pesca fluvial 26.551 licencias, de las cuales 11.442 son para el salmón.
Son los datos facilitados ayer por el Consejero de Agroganadería y Recursos Autóctonos, Albano Longo, durante la inauguración en Cornellana de la Feria Capenastur. Para el consejero «se inicia una nueva temporada marcada por el reequilibrio entre zonas vedadas, zonas libres y zonas acotadas».
Según Longo, «esta normativa nace de la convicción profunda de la actual Administración regional de que los problemas de las poblaciones de salmones en los ríos asturianos no son responsabilidad de los pescadores de caña, ya que se trata de una pesca artesanal y selectiva por naturaleza».
Por su condición de río tempranero, el Narcea tiene muchas papeletas para que el campanu salga de sus aguas. Además, este año a penas ha llovido y el caudal del río es muy bajo, por lo que los salmones tienden a dejarse ver en los pozos con más agua.
La Figal es el coto donde mayores probabilidades hay para que este año salga el primer salmón del año, «porque confluyen los ríos Narcea y Nalón, una tramo donde hay buen caudal y además es una zona que tiene un lanzamiento de cucharilla muy bueno», explica Celestino Pérez, presidente de la Asociación de Pesca Mestas del Narcea. Cabe destacar que durante el primer tramo de la temporada solo se podrán utilizar cebos naturales, lo que dificultad aún más la captura. Otro coto que puede dar la sorpresa es La Isla, que el año pasado ya dio un salmón el día de la apertura. Mientras, en el Sella, son los de la zona baja los que podrían dar la sorpresa, como el coto Sierra.
Con todo, un error frecuente para el pescador inexperto es el de confundir la zancada con el salmón: «las zancadas son salmones que desovaron pero que todavía no llegaron al mar, son más plateadas y delgadas y por tanto hay que devolverlas al río», explica Pérez.
Finalmente, y tras la pelea con el salmón, el pescador que capture el campanu se convierte en dueño y señor de su destino, aunque por lo general lo que suele hacer es subastarlo. Y este año se da la llamativa novedad de que puede elegir dos lugares: en Cornellana o en Cangas de Onís. Ya que si lo desea, el primer salmón del Sella puede ser subastado en el Oriente asturiano. Aunque tal y como se explica desde Mestas del Narcea, «es un error hacer dos subastas diferentes, porque así solo se consigue dividir la fiesta en el día de apertura», apunta Pérez.