La Reserva Mundial de la Biosfera de La Palma se opone a la construcción del puerto deportivo de Los Cancajos
En el informe de los nuevos espacios que según los técnicos ambientales deben ser protegidos, destaca el interés geomorfológico y el gran valor ambiental de la zona costera de La Ballena, donde está aprobado un complejo de índole deportivo y turístico que desde ayer ha superado todos los trámites para su adjudicación.
La Reserva Mundial de la Biosfera de La Palma considera necesaria la protección de la zona de La Ballena en Los Cancajos, en el municipio de Breña Baja, mostrando su oposición a la construcción del puerto deportivo previsto en este enclave, según se desprende del informe técnico sobre las nuevas áreas de importancia ecológica.
Los técnicos de la Reserva advierten de que esta zona costera está constituida por un conjunto de calas de interés geomorfológico y gran valor ambiental por albergar comunidades de vegetación intermareal, halófila y rupícola singulares, y un tabaibal amargo en buen estado de conservación. Destaca la presencia de un cerrajón endémico de la Isla, el Sonchus bornmullerii, con una importante población en el acantilado.
El informe de la Reserva, que será dado a conocer oficialmente mañana jueves, llega un poco tarde, ya que el futuro puerto deportivo de Los Cancajos, con un presupuesto de unos 25 millones de euros y con capacidad para unas 385 embarcaciones de entre 6 y 35 metros de eslora, ya tiene cumplimentados todos los tramites para su ejecución, después de que precisamente ayer terminara el período de información pública del estudio de impacto ecológico.
En caso de no haberse presentado alegaciones, la Viceconsejería de Medio Ambiente emitirá un informe favorable que será remitido a la dirección general de Puertos de la Consejería de Infraestructuras, que, a su vez, lo mandará a Costas para que lo apruebe de forma definitiva en un plazo máximo de dos meses. Las previsiones son que en el mes de febrero de 2009 las obras del puerto deportivo puedan estar adjudicadas.
Además de la construcción del puerto deportivo, la Reserva de la Biosfera plantea como amenazas e impactos para la zona la ubicación de una depuradora, que será clausurada en 2009; la pesca recreativa, escombreras y la recolección de especies de flora autóctonas como la almorrana. En este estudio también se muestra el impacto visual y acústico el aeropuerto y de las edificaciones cercanas, en su mayoría instalaciones hoteleras, además de flora alóctona.
Otra de las circunstancias que critican los técnicos de la Reserva, cuyo informe no será aceptado por el Ayuntamiento de Breña Baja es que al abrigo de las calas "son frecuentes las casetas ilegales, que generan importantes residuos y escombros".