Un crucero italiano repele a tiros un ataque de piratas somalíes
Un barco de crucero italiano, un crucero italiano en el que viajan 1.527 personas, 991 de ellas pasajeros y 536 tripulantes, fue atacado por piratas en la noche del sábado a la altura de Somalia sin que la agresión dejara heridos, indicó su comandante a la prensa italiana. El asalto sucedió a las 21.35, hora española, 170 millas al norte de las islas Seychelles y a 600 millas de las costas de Somalia. Seis hombres armados con fusiles Kaláshnikov acostaron su lancha zodiac al crucero de lujo italiano Melody, una embarcación de la empresa MSC, y trataron de subir a cubierta mientras disparaban contra el barco.
El capitán del Melody, Ciro Pinto, explicó ayer a la televisión Skytg 24 que los piratas "comenzaron a disparar como locos contra el crucero". Tras producirse los primeros disparos, Pinto ordenó repeler el ataque, hizo rolar el barco (dar vueltas en redondo) y mandó apagar las luces.
"Intentaron colocar una escala con ganchos, estaban subiendo, así que reaccionamos", explicó Pinto. El capitán repartió pistolas entre los guardias de seguridad. "Comenzamos a disparar, vieron que estábamos disparando, incluso les rociamos con mangueras, entonces lo dejaron y se fueron", añadió el capitán.
Después, los piratas persiguieron el crucero durante 20 minutos más, sin dejar de disparar. El Melody sólo sufrió leves daños en el casco, algunos cristales rotos y una chalupa de salvamento fue alcanzada por los disparos. "Los pasajeros vivieron el ataque en sus camarotes. No hay ningún herido, sólo dos personas tienen algunos rasguños", precisó el capitán.
Pinto explicó que vivieron momentos de gran tensión. "No podré olvidar lo que ha pasado. Parecía una guerra".
El Melody dio la alerta inmediata a la fuerza conjunta OTAN-UE que controla las costas somalíes. Un buque de la Armada española, el Marqués de la Ensenada, se dirigió hacia el lugar para ofrecer protección y escolta al crucero. Helicópteros militares sobrevolaron la zona para intentar localizar a los piratas.
La noche anterior al ataque, el crucero italiano, una mole flotante de 35.000 toneladas, 200 metros de eslora y 30 de ancho, había atracado en las islas Seychelles. El Melody cuenta con 532 camarotes y capacidad para 1.492 pasajeros y 530 tripulantes. Partió de Durban (Suráfrica) el 17 de abril, y tenía previsto llegar a Génova el 8 de mayo.
Ayer navegaba hacia el puerto jordano de Aqaba, donde se le espera el día 2 de mayo, según confirmó el consejero delegado de MSC, Pierfrancesco Vago, que pidió a la Unión Europea y a la OTAN que refuercen el despliegue de protección militar en el Índico.
"Hay demasiadas áreas sin cubrir", dijo, "la presencia de buques militares se ha concentrado en el norte, a lo largo de la costa de Somalia y en el golfo de Adén, pero este ataque confirma que los piratas están intensificando los ataques por el sur". Según medios italianos, se sospecha que los piratas tenían su base de operaciones en las propias Seychelles.
Los ataques se han multiplicado en los últimos meses en la costa este africana. La Oficina Marítima Internacional informó ayer de que los incidentes de piratería casi se han duplicado en el primer trimestre de 2009, a causa de las acciones en Somalia, donde sólo en marzo hubo 18 abordajes.
Ayer, horas después del ataque al Melody, grupos de piratas lanzaron una gran ofensiva en el Golfo de Adén. Los atacantes lograron tomar el control de cuatro barcos, entre ellos un petrolero yemení, el Qana, que viajaba sin carga y con 23 tripulantes.
La ofensiva desató la respuesta de las fuerzas yemeníes presentes en la zona, que abrieron el fuego para recuperar el control de los barcos. Dos de los piratas fallecieron en los enfrentamientos, tres resultaron heridos y cuatro fueron detenidos. Las fuerzas yemeníes lograron rescatar a tres de los cuatro barcos, informa Reuters, pero no pudieron recuperar el petrolero.
El sábado, un grupo de piratas había abordado también un carguero alemán con 17 tripulantes en el golfo de Adén. Al mismo tiempo, la industria del rescate sigue dando réditos, y entre el sábado y el domingo los corsarios liberaron dos barcos: un carguero griego secuestrado el 22 de febrero con 22 personas a bordo, y un petrolero yemení cautivo desde el 2 de enero.
El Ministerio de Exteriores italiano lleva 15 días tratando de resolver el secuestro del remolcador italiano Bucaneer, abordado con 15 tripulantes a bordo. Italia, a diferencia de países como EE UU, prefiere negociar a usar la fuerza en casos de secuestros. Muy probablemente, los piratas que atacaron el Melody conocían ese detalle.