Barcos de pesca y de recreo escapan de las bajamares para eludir la escasez de calado
Portos alega trámites «complexos» para explicar por qué sigue sin dragar en Celeiro, Burela, Viveiro y Foz
Ya han aprendido la lección. Cuando los calendarios de mareas anuncian las bajamares más grandes, se llevan sus embarcaciones de las zonas portuarias donde hay problemas de calado. Así evitan daños en los barcos, y también quedarse atrapados mientras no sube la marea. Escapar temporalmente es el camino elegido por dueños de pesqueros y de lanchas de recreo que atracan o tienen plazas de amarre en puertos mariñanos como los de Celeiro, Burela, Viveiro o Foz.
Prevenir es mejor que curar, argumentan profesionales de la pesca y navegantes recreativos. Ese remedio es un parche a un problema para el que reclaman soluciones. Casi de memoria repiten las explicaciones que reciben cada vez que piden dragados a Portos de Galicia, el organismo que gestiona casi todas las instalaciones portuarias de A Mariña. En la refriega dialéctica entran de vez en cuando los partidos de la oposición al Ejecutivo popular que gobierna Galicia.
Sin fechas ni presupuestos
La penúltima confrontación verbal por los problemas de calado en A Mariña volvió a tener como escenario una comisión parlamentaria. Desde el PSOE, el diputado Val Alonso trató de arrancar plazos y presupuestos al presidente de Portos, José Juan Durán. Val se topó de nuevo con el argumento que tan bien conocen dueños de pesqueros y de lanchas de recreo. Durán le reiteró que los dragados requieren trámites «complexos», para los que, a su vez, se necesita tiempo.
De ese y de otros rifirrafes aprenden los usuarios de puertos pesqueros y deportivos. ¿Cuál es la lección? Ayer mismo la explicaban dos, coincidiendo casi literalmente. «Lo mejor es llevarse el velero y fondearlo fuera, aunque nos cobran por un servicio que no nos dan», contaba uno. «Se a baixamar ten un coeficiente moi alto, toca fuxir de onde non hai calado», relataba otro.
Dos días antes, en una comisión parlamentaria, el presidente de Portos repetía que deben atenerse al procedimiento administrativo para los dragados portuarios. Insistía en que tratan de atender las demandas que les reiteran desde A Mariña y, como prueba, aseguraba que ahora «a maioría das dragaxes» previstas en la costa lucense «están nunha fase complexa, a de determinar o punto de verquido». Como contrapunto, la versión del diputado socialista Val Alonso. En su papel de oposición al Ejecutivo autonómico, recalcaba la demanda de «actuacións e prazos», como prueba de que la Xunta se «toma en serio, dunha vez por todas, aos portos da Mariña».
Fuente: La Voz de Galicia