UECC lidera un proyecto piloto de un nuevo combustible marino con bajas emisiones
Se trata de una mezcla de fueloil y un 30% de biocombustible producido a partir de residuos de la cáscara del anacardo
Un consorcio formado por la naviera United European Car Carriers (UECC); el servicio de Lloyd’s Register de análisis de la calidad de los combustibles (FOBAS); el fabricante de motores Wärtsilä y el suministrador de biocombustibles ACT Group, están desarrollando un combustible marino a partir de una mezcla de fueloil destilado y un 30% de un líquido procedente de residuos de cáscara de anacardo (Cashew Nut Shell Liquid, CNSL).
Según un comunicado de UECC, mediante “exhaustivas pruebas en motores y una cadena de suministro meticulosamente controlada”, ACT Group ha conseguido obtener un biocombustible basado en CNSL, conocido como FSI.100. Tras números ensayos con distintas combinaciones, este biocombustible ha recibido la aprobación de los fabricantes de motores a una mezcla al 30% con un fueloil destilado de grado DMA ISO 8217 para llevar a cabo las primeras pruebas de mar.
El biocombustible FSI.100 presenta las propiedades de un combustible marítimo de alta calidad, con muy bajo contenido en azufre así como como un punto de fluidez compatible con especificaciones para invierno. También ofrece un importante ahorro en emisiones de gases de efecto invernadero, con una reducción de éstas de hasta un 90% (9,50gCO2eq/MJ) respecto a combustibles marítimos convencionales.
Para UECC es de vital importancia esta evaluación exhaustiva y la transparencia en la adquisición de combustibles sostenibles para garantizar la fiabilidad y la seguridad de las operaciones. Especialmente tras los recientes incidentes ocurridos en el puerto de Rotterdam, que ponen de relieve los retos que plantea el uso de materias primas “no probadas” en el desarrollo de biocombustibles para mezclas con los combustibles marítimos convencionales.
La colaboración de UECC, Lloyd’s Register FOBAS, Wärtsilä y ACT Group ha dado lugar a procesos estructurados y por fases que incluyen ensayos en bancos de pruebas de motores y evaluaciones analíticas sobre la idoneidad de las mezclas de FSI.100 a base de CNSL, tanto con un fueloil residual como destilado. Para UECC, en aquellos casos en los que no exista un estándar establecido para el combustible que se ofrece, “será necesario adoptar un enfoque estructurado por fases para evaluar la idoneidad del producto para su uso a bordo de un buque, con el fin de obtener la aceptación de la clase, el fabricante y la bandera para las pruebas de mar”.