El buque hospital Global Mercy regresa a Granadilla tras su primera misión humanitaria
El pasado fin de semana, Tenerife recibió de nuevo en el puerto de Granadilla al buque hospital Global Mercy, perteneciente a la ONG Mercy Ships (Naves de Esperanza, en España), para llevar a cabo los servicios esenciales de mantenimiento tras cinco meses de labor humanitaria en Dakar, Senegal.
Tras la conclusión de dichas labores, que tendrán una duración prevista de un mes, el buque regresará a Freetown, Sierra Leona, para una estancia de 10 meses.
El director de Naves de Esperanza Gerardo Vangioni, agradeció que Tenerife siga siendo, desde 1991, el puerto base para los buques de la ONG.
Durante su estancia en Senegal, la tripulación del Global Mercy llevó a cabo cerca de 800 intervenciones quirúrgicas gratuitas y formó a más de 600 profesionales sanitarios, que podrán reforzar los sistemas quirúrgicos de Senegal.
Según Naves de Esperanza, gracias a los gobiernos de Senegal y Gambia, durante esta última visita y por primera vez, la ONG pudo atender a pacientes de dos países en un solo puerto. “Esto ha permitido el acceso a la atención quirúrgica segura y gratuita a un mayor número de personas. Un hecho crucial en el África subsahariana donde, según un informe de la Comisión Lancet, 9 de cada 10 personas no tienen actualmente acceso a una cirugía segura”, declaran desde esta ONG.
Esta era la tercera visita consecutiva de la organización a Senegal. Desde 2019, incluso a pesar de una pausa originada por la pandemia, los buques hospital Africa Mercy y Global Mercy pudieron llevar a cabo 2.966 cirugías a 2.707 pacientes.
Una tripulación de voluntarios única
Este año, para ofrecer una atención y una formación quirúrgica seguras se necesitó la ayuda de voluntarios de todo el mundo: 1.184 voluntarios de 59 países y 272 voluntarios locales que trabajaron en 30 regiones diferentes de Senegal. También fue necesario el apoyo de más de 50 socios corporativos a escala internacional y de muchos socios locales de Senegal.
Además de en Senegal, Naves de Esperanza sigue trabajando en países como Togo, Guinea y Benín, “para transformar vidas a través de acuerdos y programas” con socios e instituciones locales para proporcionar desde tratamientos dentales y operaciones de cataratas hasta cursos de anestesia pediátrica, educación en agricultura sostenible y mucho más.