El Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club recibe la placa Docomomo
La Junta Directiva de la Delegación en Bizkaia del Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro seleccionó al edificio del Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club, proyectado por los arquitectos Eugenio Mª de Aguinaga Churruca, presente en el acto, e Íñigo Eulate Soriano (1975), entre los edificios que figuran en los Registros Industrial, Viviendas y Equipamientos del Docomomo Ibérico
Para la colocación este lunes 4 de octubre, en el Día Mundial de la Arquitectura, de una placa distintiva de la importancia de dicho Edificio Social otorgada por la Fundación Docomomo (Fundación para la Conservación del Movimiento Moderno). A este acto acudieron, entre otros, Eugenio Mª de Aguinaga Churruca, el presidente del R.C.M.A.-R.S.C. Ramón Zubiaga, el vicepresidente Manuel Sendagorta, miembros de la Junta y ex-presidentes del Club como Ramón Zubiaga -padre-, José Luis Ribed, Javier Chávarri y Gerardo Teijeira, así como familiares del arquitecto, y el presidente de la delegación en Bizkaia del COAVN Asier Benavides y otros miembros de su Junta.
Las placas Docomomo -siglas de la Fundación Internacional para la documentación, valoración, difusión y conservación del Patrimonio histórico de la arquitectura y el urbanismo del Movimiento Moderno- acreditan internacionalmente el valor patrimonial del edificio donde son colocadas como en el Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club. La Fundación Docomomo se fundó en París en 1990, y se organizó en 1994 con sede en Barcelona como Docomomo Ibérico, lo que integra el estudio de la arquitectura de España y Portugal de ese período. La colocación de placas DOCOMOMO, de carácter informativo, constituye una llamada de atención sobre el Patrimonio del Siglo XX, un patrimonio cuya fragilidad requiere especial atención. Efectivamente, los nuevos edificios modernos que se empezaron a construir a partir de 1925 en España y Portugal no solo experimentaron nuevos programas y formas, sino que lo hicieron con nuevos materiales y tecnologías, poco ensayados hasta entonces. Su puesta al día y su adecuación a las normativas actuales han resultado, en ocasiones, en una merma de los valores patrimoniales de estos edificios. Por otra parte, por tratarse de un patrimonio extenso y muy reciente, es poco valorado por la sociedad y las administraciones responsables de su protección. Con la colocación de placas en edificios paradigmáticos de la arquitectura moderna del siglo XX como la del Club de Las Arenas se pretende trasladar a la sociedad y a sus representantes la importancia de este patrimonio y ponerlo en valor como parte de nuestra cultura del siglo XX, para lograr su protección patrimonial y conservación.
Tras la colocación a las 10 horas en el Edificio de viviendas en la calle Ercilla nº43 de Bilbao (Año construcción: 1938. Arquitecto: Rafael Fontán Sáenz), y a las 11 horas en el Centro de Salud Bombero Echaniz en Bilbao (Obra Sindical del Hogar y Arquitectura. Años de construcción: 1963-1971. Arquitectos: Jesús Rafael Basterrechea Aguirre y Luis Lorenzo Blanc) se produjo la colocación de la placa, a las 12.30 horas, en Real Club Marítimo del Abra y Real Sporting Club en Getxo (Edificio Social para el Club Marítimo del Abra. Año de construcción: 1974-1976. Arquitectos: Eugenio Mª de Aguinaga Churruca e Iñigo Eulate Soriano). Los actos tuvieron lugar en el espacio exterior de cada edificio seleccionado. Eugenio Mª de Aguinaga Churruca ofreció una interesante exposición sobre el por qué del edificio del Real Club Marítimo del Abra con algunas anécdotas.
El Real Club Marítimo del Abra- Real Sporting Club en Getxo (Edificio Social para el Real Club Marítimo del Abra). 1974-1976
Los arquitectos Eugenio María Aguinaga Churruca e Iñigo Eulate Soriano, junto al aparejador Manuel Gabiola Zubiaurre, fueron los ganadores del concurso convocado por el Real Club Marítimo del Abra y el Real Sporting Club de Getxo para el diseño de su nueva sede. Este nuevo edificio sustituyó a uno anterior desaparecido en 1973 que ocupaba el mismo emplazamiento entre la actual Avenida Zugazarte y el muelle de Las Arenas. Esta ubicación, entre el mar y uno de los principales ejes viarios de Getxo, así como la sinceridad en el empleo de los materiales de construcción, son las características principales que dan forma a un volumen escultórico y de gran presencia. La arquitectura se muestra como un prisma metálico y ligero que se eleva sobre el muelle abriendo su mirada hacia el Cantábrico a través de grandes ventanales horizontales, un lenguaje muy próximo a la arquitectura de Ludwig Mies van der Rohe. Como contrapunto de este lenguaje se define la fachada hacia la avenida Zugazarte, que es también el acceso principal al edificio. En ella, un gran volumen horizontal volado, pétreo, casi ciego y de estética brutalista, sirve como pórtico de acceso al conjunto y permite una planta baja totalmente diáfana y de gran ligereza. El conjunto cuenta con planta baja, dos plantas superiores y una azotea transitable. En éstas es donde se sitúan los usos principales de los clubes: salones, restaurante, instalaciones deportivas y espacios sociales. También existen dos plantas de sótano para alojar los aparcamientos y las instalaciones. Desde la primera de ellas, y a través de un túnel privado bajo el muelle de Las Arenas, se accede a los pantalanes, puerto, las piscinas y otros espacios como su Escuela de Vela. El 26 de noviembre de 1973, el monumental y emblemático edificio social resultó completamente destruido por un incendio provocado por una acción terrorista. El Club perdió el edificio y su contenido de cuadros, trofeos y recuerdos. El empuje de los socios, directivos y presidentes, consiguió sacar adelante la construcción del proyecto ganador del concurso, obra de los arquitectos Eugenio Mª Aguinaga e Íñigo Eulate. Tras algunas dificultades, finalmente se pudo materializar la construcción del sólido y elegante edificio actual en el mismo lugar donde se levantaba el antiguo. La actual sede social fue inaugurada en junio de 1976 y es obra de los arquitectos Eugenio Aguinaga e Iñigo Eulate, al ser elegido primer premio en el concurso.