De Cabo Silleiro al río Miño

Si navegamos en demanda de Portugal o por el contrario, recalar en la ría de Vigo, nuestra derrota coincidirá alejada de la línea costera, llevando como clara referencia a escasos metros de ella y en paralelo una cordillera escarpada y de bastante elevación denominada sierra de la Groba (la más al N, entre Silleiro y la mitad del tramo) y de la Valga (desde Mougas que coincide con la mitad del tramo hasta A Guarda), con una cota máxima de 642 metros.

Las aguas de Silleiro no son muy aptas para una navegación placentera.
De tierra salen en dirección NW multitud de piedras y lajas hasta no menos de 1.500 m del faro antiguo donde trabaja la mar que rompe con gran potencia.
La boya del Lobo de Silleiro (f)(wp) es la mejor marca para librar todo el pedregal.
Esta boya, fondeada a 0,8 M al NW del cabo baliza el bajo más importante, peligroso y foráneo de esta zona formado por tres piedras: una siempre visible y las otras dos sólo en bajamar pero su presencia es continuamente acusada por la rompiente.

El Faro de Cabo Silleiro (f) está situado a 240 m de la mar y cerca de la Punta de las Negras.
Es de muy fácil identificación.
Al SW y a 1,8 M de la Punta de las Negras fondean dos boyas esférica amarilla medidoras de oleaje(42º 05’97N 08º 55’64W) y en situación (42º 05’8N 08º 55’9 W).

Otros accidentes geográficos relevantes entre el cabo y el puerto de A Guarda son la Punta Centinela a 1,65 M de Silleiro,
Punta Pedra Rubia a 2.2 M y punta N de Mougás con el islote de El Cagado entre ambas.
A continuación la denominada cala de Mougás que termina en punta Robaleira. Zona muy conocida por los pescadores de lubina.

A 1,3 M de esta caleta está punta Orelluda, baja y terminada en dos petones y el Estero de Oia el entrante más notable de esta costa, a 1,5 M de punta Orelluda.
Entra al NE y en su fondo se encuentra el pequeño puerto pesquero artesanal de Santa María de Oia.
A orillas del puerto y como edificio notable tenemos el Mosteiro de Oia de gran belleza y a su espalda la sierra de la Valga.

A 2 M al S de esta dársena se halla el islote Agoeira que separa unos 100 m de la costa.
0,5 M antes de A Garda está la Caleta Grande, en cuyo fondo hay un pequeña playa, única de esta costa.
A Guarda 41º 54,1’ N 008º 52,8’ W es la última villa por el S de la Comunidad Autónoma de Galicia.
Su pequeño puerto, abierto al W, de 400 m de longitud y un ancho de 100 m, solo es utilizable para embarcaciones menores.
Protegido por dos malecones balizados (f) con un abra de 125 m y un calado en puntas de 8 m que disminuye gradualmente hasta el fondo del puerto.
La naturaleza del fondo es de arena en el centro y arrecifes en sus orillas.

Atención: a este puerto solo accederemos con buen tiempo. Con mar gruesa o temporales del 3er y 4º cuadrante, las pequeñas embarcaciones que fondean entre puntas, es necesario vararlas en tierra. En las cercanías, la mar arbola considerablemente y las olas entran en puerto con mucho recorrido.
Desde A Guarda hasta la boca del Miño, la costa corre convexa hacia el mar, dominada por el monte de Santa Tecla.
Es muy sucia y se aconseja navegarla con un resguardo mínimo de 600 m.

El río Miño tributa al Atlántico entre las localidades de Caminha (Portugal) y Camposancos - A Guarda (España), es navegable hasta Tuy, a unos 30 kilómetros de la desembocadura, pero como toda la navegación fluvial, se hace difícil por lo cambiante de los fondos y las corrientes.
Las mareas se hacen sentir a unos 40 km. aguas arriba con una intensidad máxima de la corriente en vaciante de 4 nudos y la diferencia entre pleamar y bajamar en la desembocadura entre pleamar y bajamar en la desembocadura y Tuy llega a ser de más de 1 hora.
Su barra es de 1.400 m. de amplitud entre las puntas de Santa Tecla (España) y Punta Ruiva (Portugal) muy expuesta al oleaje y a los vientos del W y sobre todo SW. Pero no os engañeis, muy poco es navegable. Entre estas dos puntas, a unas 0,2 M. al W de Punta Ruiva en plena desembocadura se eleva el Islote Insua y todo un conglomerado de piedras (Insua Velha) y arrecifes. Su reconocimiento no ofrece dudas (a pesar de su poca elevación) por el fuerte construido sobre el islote, donde en una de sus garitas, la que da al NW se levanta el faro (f) que con sus tres sectores, B, R y V nos baliza las zonas libre y navegables así como el área peligrosa y los bajíos.
En toda la barra la mar arbola y rompe con mucha frecuencia.

A Insua y el conglomerado de piedras pertenecen a Portugal.
Condicionantes en la navegación por el Miño:
1º Las variaciones en su caudal son por término medio de 2 m. entre pleamar y bajamar. Tener en cuenta la diferencia horaria entre pleamar y bajamar, entre Tui y Camposancos. La pleamar suele tener una difencia de 01h +/- 45m y la bajamar de 02h +/- 50m es decir, si la plea en A Guarda es a las 00h 00m, en Tuy será a las 01h +/- 45m. . La bajamar en A Guarda es a las 00h 00m, en Tuy será a las 02h +/- 50m (aproximadamente).
2º Recomendamos navegar siempre en condiciones de media marea a alta para evitar varadas.
3º La corriente en vaciante es de unos 4 nudos de media. En mareas vivas y en algunos puntos esta velocidad se puede llegar a doblar. La corriente en entrante es de una media de 3 nudos y al igual que en la descendente se puede llegar a doblar en algún punto.
4º Calado máximo que no exceda de 2,5 metros.
5º No fiaros del color del agua del río, es muy difícil apreciar si tenemos agua o si por nuestra proa aflora algún banco de arena. En caso de duda moderar la velocidad al máximo y en el caso de un motor con cola, levantarla para evitar que aspire arena.
El tramo navegable del río Miño, carece de carta náutica y de señalización. La navegación por el canal adecuado se efectúa por marcas en tierra, por supuesto sin descuidar los números de la sonda. Es conveniente dejarse asesorar por expertos que conocen el río y tomar buena nota. Para los habituales de verano, aconsejarles que las primeras singladuras las realicen con marea alta, realizando las observaciones de los posibles cambios en los bancos de arena y marcar hitos en tierra para librarlos.
ENTRADAS AL RÍO MIÑO
La situación de la Insua provoca dos bocas de entrada al río Miño:
Barra del Norte (Orilla Española). Entre la Insua Velha y la Punta Barbela (en extremo complicada).
Barra del Sur (Orilla Portuguesa). Entre Insua y Pta Ruíva.
La del Norte es más ancha que la del Sur pero más sucia, con el peligro aumentado de la variación de situación de los bancos de arena, tanto en posición como en volumen llegando en las grandes riadas a cerrarse unas bocas para abrirse otras. Atención: la ausencia de canales señalizados en esta entradas nos aconsejan comentar que si se quiere entrar se realizará con la supervisión de algún buen conocedor de la zona y disponer de cartas de navegación de gran escala y actualizadas.
Sin duda entraremos por la barra del S.
Como su descripción sería exhaustiva acompañamos planos con los rumbos de entrada, (wp) de cambios de rumbo y los tres bajos de piedra que nos encontraremos ya en el cauce del río:
As Oliveiras: 41º 52,94’N 008º 50,98’W señalizado por Baliza. En Camposancos.
Las Ovejas: 41º 58,9’N 008º 42,86’W. Muy peligroso, subiendo el río despues del puente de Goian, en Forcadela. Sale del lado portugues hasta un 70% del cauce. Navegar siempre por el lado español.
El Carnero: 41º 59,03’N 008º 41,85’W. A 1 M aguas arrriba del anterio. Se encuentra cerca de la ribera española. Navegar desde la mitad del río hacia la ribera portuguesa.
Consejos prácticos para acceder al estuario miñota:
Vigilar siempre las olas. Por mi propia experiencia os comentaré que en navegaciones por esta boca S (por supuesto), en jornadas de mar de viento en calma y con un ligero maretón del NW, desde la cresta de la ola, en plena enfilación portuguesa, se observa perfectamente la arena del fondo en el valle de la misma, siendo necesario jugar con la velocidad para no surfear por su pendiente.
Ya en el cauce del Miño, la costa española corre en dirección NE hasta el puerto del Pasaxe, formando la playa de Camposancos. La boca se estrecha hasta los 400 m en la contraposición de Punta Cavedelo en Portugal y a partir de aquí y tierra adentro, adquirir la máxima anchura de 1 M entre orillas, a la altura de la pedanía de Camposancos.
Seguir la enfilación de Camposancos, se encuentra con facilidad.