¿Cómo nacieron los ULTIM?

“Nadie se había imaginado el concepto de la A a la Z. Es una historia que terminó saliendo a la luz. La de un barco brillante, la de la tecnología de la Copa y también la de los hombres que quieren mover su campo de regata por todo el mundo..." Así resume Thomas Coville la historia del ULTIM, que anima su vida y la de un un puñado de patrones excepcionales durante casi 15 años.
El brillante barco es el Groupama 3, botado en 2006. En ese momento, los trimaranes de regatas en alta mar tenían todos 60 pies (los ORMA), y los grandes multicascos que batían récords y medían entre 30 y 40 metros eran más bien catamaranes. Un ejemplo único en este paisaje, Groupama 3 parece un trimarán ORMA ampliado. Su tamaño está curiosamente fijado en 31,50 metros. “El objetivo era hacer un barco que no fuera demasiado caro, pero lo más grande posible con el equipamiento existente”, afirma Stéphane Guilbaud, hoy secretario general de la clase ULTIM y director del equipo en la época de Groupama. “Tomamos el winchhe más grande del catálogo de Harken y determinó la superficie de la vela de proa que podíamos enrollar. ¡Eso nos dio el tamaño del barco! »

Groupama 3 marca el ritmo y el marco
El patrón se llamaba entonces Franck Cammas y, tras ganar el Trofeo Julio Verne en 2010 (48 días, 7 horas, 44 minutos y 52 segundos), afrontó la Ruta del Ron que ganó el mismo año “C”. dejó su huella”, dice Franck en retrospectiva. “Habíamos construido un barco que era potente en términos de ancho pero que seguía siendo ligero. La referencia en aquel momento era el Orange 2, que pesaba 30 toneladas. ¡Grupama 3 pesó 15! »
La primera lección de Groupama 3 es haber demostrado que a igual potencia, un trimarán podría ser muy ligero y mucho más polivalente. ¡Salgan de los catamaranes! Su patrón también demostró que lo que se pensaba que era imposible: navegar en un trimarán de 100 pies diseñado para la tripulación en solitario, no lo era.

Loïck Peyron y Francis Joyon confirmarán durante la Ruta del Ron de 2014 y 2018, al timón de este barco, que era de buena cuna y que el hombre tenía una capacidad de adaptación sorprendente... Groupama 3 es una prueba tal que será utilizado para determinar el marco de los ULTIM redondeados a 32 mx 23 m.
En 2013, la Copa América que tuvo lugar en San Francisco fue el segundo punto de inflexión de lo que se convertirían los ULTIM. La idea de volar sobre el agua no es ciertamente nueva: ¡Eric Tabarly ya había jugado con ella cuando imaginó a Paul Ricard en 1979! - pero es la primera vez que barcos capaces de navegar en ceñida, a favor del viento, virar y trasluchar sin tocar el agua y a velocidades vertiginosas, dan un espectáculo. Es un cambio de paradigma y en el pequeño mundo de las regatas oceánicas hay un entusiasmo generalizado. Todos empiezan a volar. François Gabart prueba suerte en la Clase A, estos pequeños catamaranes deportivos ultraligeros equipados con foils, Franck Cammas gana la Little America's Cup en un hidroala de la Clase C antes de lanzarse a atacar al "grande"...

El vuelo, un cambio de paradigma
Pero al botar máquinas de velocidad en alta mar, todavía se requiere cierta precaución. Sobre todo porque ya no se trata sólo de cruzar el Atlántico sino de dar la vuelta al mundo. “Desde 2008 supe que el campo de regata sería el planeta. Por eso, junto con Christian Dumard, propusimos a Sodebo construir un multicasco récord”, afirma Thomas Coville. En primer lugar, Irens-Cabaret, de la que Francis Joyon construyó una casi hermana con la que batió una vez más el récord de la vuelta al mundo en solitario, fue reemplazada en 2013 por una máquina mucho más potente pero todavía arquimediana. Thomas Coville desmonta el viejo Geronimo de Olivier de Kersauson y lo transforma en un trimarán de ancho máximo ULTIM. Renombrado Adagio, también estará en la salida del ARKEA ULTIM CHALLENGE - Brest en manos de Eric Péron. Por su parte, François Gabart lanza su trimarán Macif en 2015. Da un paso hacia el vuelo con foils y planos de apoyo bajo los timones, pero la

deriva sigue siendo clásica, sin flaps: “La Copa había estado ahí pero no sabíamos si podríamos fabricar foils capaces de soportar los esfuerzos para un vuelo total", afirma el vencedor de la Vendée Globe 2012. Sin embargo, con su plan VPLP, que rebota de ola en ola más de lo que vuela, literalmente explota el récord de vuelo en regata alrededor del mundo en solitario sin escalas llamada Trofeo Saint Exupéry, anteriormente celebrada por ThomasCoville. 42 días, 16 horas, 40 minutos y 35 segundos, el récord de Macif establecido en 2017 sigue siendo el segundo mejor tiempo establecido hasta la fecha.
Mientras tanto, Gitana está probando diseños de apoyo en los timones de un MOD 70 que ganó la Transat Jacques Vabre 2015. El equipo del fallecido Benjamin de Rothschild tuvo la intuición de que un hidroala podría completar una vuelta al mundo. El estudio de Edmond de Rothschild fue encargado a Guillaume Verdier, el arquitecto del Team New Zealand. Las especificaciones son multiprograma: Solo, equipo, carreras, récord… “No nos unimos a la Clase ULTIM que acababa de nacer (en 2016), pero nos aseguramos de situarnos dentro del marco físico marcado por el reglamento. ”, dice Cyril Dardashti, el director del equipo. Y continúa: “Al principio solo mostrábamos fotos del barco y ningún vídeo. ¡Los comentaristas solían decir que eran falsos! »
Edmond de Rothschild crea un nuevo estándar y el campo se expande
El plan Verdier, liderado entonces por Sébastien Josse, vuela al 100% sobre cuatro soportes: foils, flotador y timones de casco central y orza equipada con un ala de patín (plano portante). Los comienzos son caóticos (rotura de foils en la Route du Café 2019, flotación rota durante la Route du Rhum-Destination Guadeloupe 2018), pero Edmond de Rothschild impone un nuevo estándar de rendimiento. Banque Populaire avanza con el primer Banque Populaire IX que naufraga en la Ruta del Ron - Destino Guadalupe 2018 y luego el actual Banque Populaire XI. Thomas Coville lanza su nuevo Sodebo Ultim 3. Y François Gabart completa la gama con SVR - Lazartigue lanzado en 2021, esta vez íntegramente volando. No hay duda de que Edmond de Rothschild cambió la situación.
Más lejos, más rápido, ¿no se resume así la historia de las regatas oceánicas? Debemos reconocer que la aceleración en los últimos quince años ha sido un tanto vertiginosa. “Los ULTIM son la extensión de todo lo que aprendimos sobre los trimaranes ORMA y la Copa América”, concluye Franck Cammas. Es casi un resultado natural. El siguiente paso será, sin duda, volar monocascos. ¡Porque los ULTIM quizás no sean el paso final! » La historia está en proceso y el ARKEA ULTIM CHALLENGE – Brest será uno de sus capítulos más significativos.