Portada ›› Vela ›› Solitarios y A2 ›› ZUMEX Y JUAN CARLOS OLIVA CAMINO DE LA ROCHELLE

ZUMEX Y JUAN CARLOS OLIVA CAMINO DE LA ROCHELLE

ZUMEX Y JUAN CARLOS OLIVA CAMINO DE LA ROCHELLE

-El skipper del Real Club Náutico de Valencia navegará en La Rochelle para ultimar la puesta a punto del prototipo Transat 6.50
-La Charente Maritime – Bahía 2011 tiene prevista la salida el próximo 25 de septiembre

Juan Carlos Oliva y su prototipo ZUMEX, navegando bajo la grimpola del Real Club Náutico de Valencia se desplazará a la ciudad francesa de La Rochelle, puerto de salida de la Charente Maritime – Bahía 2011 con el objeto de realizar una serie de entrenamientos con otros skipper de la clase prototipo. La Rochelle será pues la nueva base del proyecto ZUMEX – Charente Maritime – Bahía 2011 del skipper valenciano.

 

Oliva hace un pequeño balance de lo que ha sido el trabajo hasta la fecha además de esbozar unas líneas de su preparación hasta el momento de la salida de la prueba, prevista para el 25 de Septiembre “El periodo que inicia ahora es muy importante para el proyecto, en los últimos meses el barco se ha optimizado y se ha realizado un buen programa de entrenamientos”, añadiendo que “ahora entrenaré en La Rochelle con diversos prototipos de última generación para ver a que nivel me encuentro. Soy consciente que, aunque dispongo de un buen prototipo, hay pequeñas diferencias de peso con las unidades de última generación. Dispongo de un nuevo juego de velas a estrenar que espero ayuden a mantener alto el porcentaje de rendimiento del prototipo”, explica.

 

La Charente Maritime – Bahía 2011 cuenta, a fecha de hoy, con 84 skippers entre prototipos y barcos de serie, quienes deberán navegar las 4.200 millas náuticas que separan La Rochelle de Salvador de Bahía, dividida en 2 etapas; La Rochelle – Funchal de 1.100 millas náuticas y Funchal – Salvador de Bahía de 3.100 millas náuticas. La prueba, más conocida como la Mini Transat, es una de las competiciones oceánicas mas extremas. Los regatistas deben cruzar el océano en barcos de 6.5 metros de eslora y 3 de manga sin ningún tipo de ayuda exterior.

 

Para Oliva, la presente edición está marcada por los grandes avances en la competición, no solo en los prototipos de última generación sino en el buen nivel de preparación de los skippers. “La clase Transat 6.50 prototipo está absolutamente profesionalizada. Skippers de primer nivel mundial con barcos de última generación y unos programas de entrenamiento y regatas muy intensos hacen que esta clase tenga un nivel elevadísimo donde desde la misma salida se pisa el acelerador a fondo. Hay que buscar el punto de equilibrio entre llevar el acelerador a fondo y evitar roturas” ,concluye.