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La flota de Figaro 2 en el Golfo de Vizcaya navegando con dos dígitos de velocidad

La flota de Figaro 2 en el Golfo de Vizcaya navegando con dos dígitos de velocidad

Después de una jornada peleándose entre vientos erráticos, corrientes y algas, remontado Oussant se produce un reagrupamiento de la flota. Cambio de líder y recuperación de velocidad que llega a los dos dígitos empujados por un NE que llena los spinnakers y permite poner proa a la recalada en el Norte de Galicia, remontar Finisterre y pocas millas a Sur tras Monte Louro arribar a la Ría de Muros y Noia.

Cambio de líderes, primero Gildas Mahé (Breizh Cola) ha cedido el lugar a Anthony Marchand (Royer Group-Secours Populaire), actualmente la flota de 36 Figaristas, está encabezada por Sebastien Simon (Bretagne CMB Performance). Uno de los viejos rokeros de los figaristas, tras quince años y celebrando su última edición de La Solitaire Le Figaro Urgo hasta su hidroplano sucesor, ahora muestra su popa al resto de solitarios y lanza su órdago para rematar la faena en la Ría gallega.

No es una sorpresa ver a Sebastien Simon en cabeza y queriendo dejar su huella en esta segunda etapa, tras sentirse mal pagado por su audacia y velocidad en la primera, donde terminó cuarto. Fue el primero en trasluchar en el centro del Golfo, para hacerse con el control de la flota .

Detrás, a 2,5 millas, Eric Peron (Finisterre Sea Wind) es de hecho el único capaz de aguantar el tren de Sébastien Simon, mientras que un poco desplazado en el oeste de este dúo, un pequeño grupo a, 4-5 millas del líder, formado por Alan Roberts (SeaCat Servicios), Pierre Leboucher (Guyot para el Medio Ambiente), Xavier Macaire (SNEF Group), Pedro Quiroga ( Skipper Espoir CEM-CS), Charlie Dalin (Skipper Macif 2015) y Antony Marchand (Royer Group-Secours Populaire).

 

En estas condiciones con el spinnaker arriba y velocidades medias de 11-13 nudos, los figaristas varían cada hora su ETA (hora de llegada estimado) a la ría de Muros-Noia.

Como entre Le Havre y la bahía de Saint-Brieuc, se llegará a meta de esta segunda etapa de noche, le que hace decir a Sébastien Simon: "El llegar por la noche a un estuario, no es necesariamente una muy buena idea, ya he vivido una llegada a Sanxenxo donde nos quedamos casi siete horas frente al puerto, por lo que puede ser que la esta sea larga, y sorpresiva ". De hecho, fue en 2015 en la primera etapa donde Thierry Chabagny se había aprovechado de estas condiciones. ¿Puede volver a ocurrir tal escenario la noche del martes al miércoles? No estoy seguro, la Ria de Muros-Noia suele tener una buena brisa nocturna . No en vano muchos regatistas y en clave de humor a los mares que bañan el puerto deportivo de Portosín, cambian el topónimo por “Ventosín”.