Guyader Bermuda1000 Race. Últimas millas para Charlie Dalin

Por el momento, el patrón del Apivia sigue manteniendo velocidades medias por encima de los 14 nudos navegando a un largo por el borde de la cresta que bloquea la ruta de la flota tras el paso del waypoint de Gallimard, trimando y cambiando velas con las pequeñas variaciones en el viento. Salvo daño, nada debería, en principio, privarlo de la victoria. ¡Una victoria que debería firmar con casi quince horas de ventaja sobre su subcampeón, Jérémie Beyou (Charal) y más de 24 horas sobre el resto del pelotón!
"Estoy feliz de haber encontrado el viento del suroeste. Este flujo me impulsa hacia Bretaña. No del todo hacia Brest, pero no muy lejos. ¡Es bueno, en cualquier caso, moverse hacia el este! comentó Charlie Dalin, que vuela hacia la victoria en esta Guyader Bermuda 1000 Race. Y por una buena razón, en cabeza desde las primeras millas de la regata, el patrón de Apivia ha ampliado su ventaja de forma lenta pero segura hasta llevarla a casi 130 millas. ¡Una diferencia bastante excepcional en una regata de 1.200 millas!

Nuevamente, de acuerdo con las últimas rutas, unas quince horas finalmente deberían separarlo de su perseguidor más cercano, mientras que todavía estábamos hablando de una brecha de 24 horas esta mañana. “Jérémie Beyou logró salir de la zona tranquila del norte. Por lo tanto, debería completar el recorrido mañana por la tarde”, explicó Christian Dumard, el asesor meteorológico. Evidentemente, esto suena como una muy buena noticia para el patrón del Charal que, salvo fallo, evitará un reagrupamiento a pocas millas de meta con el pelotón situado cerca de la costa española. Una opción que, de momento, está resultando beneficiosa para toda la flota, que mantiene este jueves velocidades de dos dígitos, tras una noche delicada, eso sí, con vientos suaves. “Desde el punto de vista de la progresión, fue una noche frustrante. Era complicado hacer avanzar el barco. Después de pasar el waypoint de Gallimard, pensé que íbamos a encontrar algo de viento, pero la calma duró hasta el amanecer”, confirmó Sébastien Marsset (Cap Agir Ensemble #SponsorsBienvenus).

Vigilancia frente a España
Él y todos sus adversarios que viraron ayer hacia el sur se benefician actualmente de un viento del noreste que sopla en torno a los quince nudos. Todos avanzan en ceñida hacia La Coruña y todos tienen que estar atentos, por un lado porque el tráfico es denso en torno al DST del Cabo Finisterre, y por otro lado porque la flotilla 24F con base en Lann Bihoué localizó dos zonas de concentración de tablones de madera que podría resultar peligroso para los barcos. "Siempre es un lugar complicado para la navegación, sobre todo porque, al acercarnos a la costa, también corremos el riesgo de encontrarnos con pescadores que no encienden todos sus AIS", comentó Giancarlo Pedote (Grupo Prysmian) que, como los demás, continuará su rumbo al este antes de ver el cambio de viento hacia el norte y así comenzar una larga virada hacia Brest. "No habrá opciones en la opción", dijo Hubert Lemonnier, director adjunto de regata.
¿Nicolas Lunven y su barco de orza en el podio?

Jugar bien con las pequeñas oscilaciones del viento y optimizar su elección de velas serán sin duda las claves del rendimiento. “El viento sigue subiendo gradualmente y gira a la derecha. Deberíamos virar de noche alrededor de la punta de Galicia, luego subir hacia la punta de Inglaterra y, todavía ceñidos, amurados a estribor. No es el aspecto más divertido. Hace buen tiempo, no hace frío, las noches son geniales y estoy muy contento con mi regata hasta ahora. Ojalá que dure ! “, declaró Nicolas Lunven (Banque Populaire) que actualmente se encuentra en la 4ª posición con su barco de orza, diez millas por detrás de Louis Burton (Bureau Vallée) y tres millas por delante de Isabelle Joschke (Team MACSF). No hace falta decir que entre estos tres, la lucha no ha hecho más que empezar. En juego, el tercer puesto del podio. “No me veía tanto en la regata con todos estos hermosos barcos a mi alrededor, y especialmente todas estas maniobras para estar encadenado. ¡Me recuerda al Solitaire du Figaro, este curso y este ritmo! “, indicó el franco-alemán que ciertamente no ha dicho su última palabra tanto como sabe, ¡detrás, está empujando duro!