El Central Lechera Asturiana cruza el Estrecho de Gibraltar

El “Central Lechera Asturiana” cruzaba esta madrugada el Estrecho de Gibraltar tras abandonar Puerto Sherry (Cádiz) ayer lunes, día 6 de diciembre. Así las cosas, el barco de Merediz y Palacio continúa su travesía hacia Barcelona después de desarbolar frente a la costa portuguesa, situación que superaba gracias a un improvisado aparejo de fortuna. Ahora, el barco de Merediz y Palacio se encuentra a escasas cien millas de Cabo de Gata en su ruta hacia Barcelona.

“Fue como esperábamos: más de 30 nudos del Este en el Estrecho… Era una locura cruzar en esas condiciones, así que tomamos la decisión adecuada” relataba Juan Merediz, patrón del “Central Lechera Asturiana”. “La situación amainó, así que podemos continuar con total seguridad. Aunque todavía hay mucha mar, el viento ha caído muchísimo así que vamos tranquilos, con vientos de unos diez nudos de intensidad” relataba el asturiano que, al igual que el resto del equipo, confía en tomar la salida de la Barcelona World Race el próximo 31 de diciembre.

- El Tetris del “Central Lechera Asturiana”
Si en el mar las cosas no están resultando nada sencillas –navegar con un improvisado aparejo de fortuna no es fácil para nadie-, en tierra se trabaja a destajo. Así, Juan Merediz, que sigue al barco por carretera, está encargándose de las velas, por lo que los viajes Barcelona-Valencia, Valencia-Barcelona se han convertido en lo más habitual, tal y como relataba el asturiano: “Ahora me voy a Barcelona en furgoneta y, en cuanto la apague, me vuelvo a Valencia para seguir de reuniones con los veleros. No podemos ni queremos parar. Hay que tener todo bien atado cuanto antes”.

Por su parte, Eduardo Marín no se da por vencido y ahora, con la huelga de controladores ya olvidada, sigue trabajando mano a mano con los ingenieros para que todo lo relacionado con el palo esté preparado cuando el “Central Lechera Asturiana” llegue a Barcelona. Y mientras tanto, Juan Pinacho desde Sanxenxo mantiene la alerta mientras organiza el traslado de materiales.

“Están haciendo verdaderos malabarismos” comentaba Merediz, quien se muestra tremendamente agradecido a “su” equipo de tierra.

Y mientras tanto, el reloj sigue contando los días que quedan para la salida de la Barcelona World Race: 24.