EL “CENTRAL LECHERA ASTURIANA”, RECORTANDO MILLAS

Sin prisa, pero sin pausa, el “Central Lechera Asturiana” sigue recortando millas en los "Cuarenta Rugientes" y en las últimas 24 horas se ha convertido una vez más en el barco más rápido de la flota al navegar a una media de 16,9 nudos, lo que le ha permitido navegar la friolera de 407 millas hacia la llegada.

Y es que Juan Merediz y Fran Palacio sigue inmersos en el sistema de borrascas que tan buenos réditos le está dando al tándem asturiano aún a pesar de las difíciles condiciones a bordo, tal y como relataba Merediz: “¡Por fin la vida a bordo tiene que ver con lo que nos habían contado o habíamos leído! (…) El barco es agua. En la cubierta, ríos de agua helada - y más que va a enfriar- que impactan constantemente contra todo cuanto allí está, incluidos nosotros. La cabina es humedad y olor. La humedad lo impregna todo; y el verbo es acertado porque todo da sensación de pegajoso. Cuando nos acostamos, nos peleamos con las telas interiores del saco mientras ponemos la ropa que nos quitamos bajo nosotros para que esté más caliente, quizás más seca, cuando nos levantemos”.

Sea como sea, el “Central Lechera Asturiana” sigue sacando partido a sus buenos registros y se acerca peligrosamente al “Fòrum Marítim Català”, del que tan sólo le separan ahora 304 millas –el ESP 23 ha arañado otras 100 millas más- y eso sin tener en cuenta los buenos registros en cuanto a velocidad que está firmando el ESP 23 ya que según el parte de 10:00 horas, el “Central Lechera Asturiana” navega más rápido que su nuevo objetivo: el barco de Marín y Aglaor.