EL “CENTRAL LECHERA ASTURIANA”, CON LA ELECTRÓNICA A PUNTO

Sin prisa, pero si pausa, Juan Merediz y Fran Palacio están viendo cómo la suerte se pone de su lado en Wellington (Nueva Zelanda). Y es si todo marcha a buen ritmo, lo más seguro es que el “Central Lechera Asturiana” tenga la electrónica perfectamente preparada para que, en caso de que se arregle el palo, el ESP 23 vuelva a la competición.

“Esta noticia es increíblemente buena” declaraba un emocionado Merediz y es que, tal y como el asturiano relataba: “Al romper el mástil, rompes también los cables interiores y las veletas, que son fundamentales para el piloto automático, también sufren. En el momento de la desarboladura conseguimos salvarlas para poder desmontarlas y hacer, al menos, una aprovechando nuestro material de respeto en el barco. Los cables sí hay que sustituirlos, por supuesto, pero también lo haremos con material de respeto. Es te es un paso muy importante en nuestro camino a Barcelona. Ahora sólo queda confirmar si el palo puede arreglarse”.

Sin lugar a dudas, están siendo unos días frenéticos en la ciudad kiwi ya que la idea es que todo esté perfectamente preparado para que, en caso de que el mástil pueda arreglarse, no haya otros motivos que retrasen la posible vuelta al agua del “Central Lechera Asturiana”. Aún así, Merediz y Palacio no quieren lanzar las campanas al vuelo ya que como ellos mismo comentaron en alguna ocasión: “De momento, el palo sigue en dos”.

La Barcelona World Race más dura
Sin lugar a dudas, ésta no está resultando una vuelta al mundo al uso; y es que la extrema dureza que está viviendo la flota está marcando todos y cada uno de los días de Merediz y Palacio en Wellington: “Lo realmente lo importante es que todos están bien; pero queremos aprovechar para enviar un mensaje de lo más especial a nuestro compañero de batallas, al ‘Groupe Bel’. Estaba haciendo una regata consistente siempre que le dejaron los problemas mecánicos, pero todos hemos podido ver que son una tripulación extraordinaria ¡Bravo por Kito y Seb! Y del ‘Mirabaud’… Tenemos sentimientos de tristeza y preocupación ya que no es fácil volver a tierra sin el mástil; pero estamos seguros de que la experiencia de ambos les sacará de allí. Y a todos los barcos españoles, ¡muchísimo ánimo porque estáis haciéndolo de diez! Barcelona os espera”