BWR. Las últimas millas

El Renault Captur navega las últimas millas de la Barcelona World Race ciñendo en el último tramo que le separa de la línea de llegada. Jörg Riechers y Sébastien Audigane, si no hay contratiempos, terminarán esta noche la vuelta al mundo a dos como sextos clasificados. Mientras tanto, el Spirit of Hungary navega en el Atlántico pensando ya en el estrecho de Gibraltar y el mar Mediterráneo, con una estimación de llegada a Barcelona para el próximo lunes por la noche.

Jörg Riechers y Sébastien Audigane navegan a poco más de 75 millas de la línea de llegada en Barcelona. El dúo germano francés afronta sus últimas horas en el mar sorteando una zona de poco viento antes de enlazar con un viento moderado del Este con el que deberían cruzar la línea de llegada entre esta noche y la madrugada de mañana. “Estoy realmente contento de llegar al final, muy contento de que se acabe”, ha dicho Riechers. La regata para el Renau lt Captur no ha sido, para nada, fácil. Desde los primeros compases del Mediterráneo, en su ruta de ida, los problemas se han ido sucediendo a bordo pero sus patrones nunca han tirar la toalla. “Siempre ha habido cosas que reparar, como por ejemplo los problemas con el timón que han destrozado nuestro recorrido. No ha sido el recorrido más placentero”, ha remarcado esta mañana el patrón alemán. A bordo del Renault Captur empieza a escasear la comida y la bebida. “Estamos a punto de consumir la penúltima bolsa de té”, ha dicho Audigane tras 105 días de navegación. “Esta noche nos tocan tapas, filetes y patatas fritas con un pastel de chocolate de postre, del que ya hemos hablado mucho”, ha avanzado el francés.

Menos de 800 millas

A bordo del Spirit of Hungary también se respira alegría por la cercanía a la línea de llegada. Con una velocidad media de 12 nudos, Nandor Fa y Conrad Colman aprovechan unas condiciones meteorológicas favorables para poner proa hacia el estrecho de Gibraltar. “Madeira fue el último hito para nosotros en el Atlántico, el próximo trozo de roca que veremos será Gibraltar, es algo muy emocionante”, ha comentado esta mañana Colman. El estado de la quilla sigue siendo uno de las principales inquietudes a bordo del Spirit of Hungary. “No nos preocupa un fallo catastrófico, no vamos a terminar del revés, pero sin duda es una situación muy estresante en estos momentos”, ha reconocido el navegante neozelandés. Por su parte, Nandor Fa se muestra también optimista aunque no esconde la fatiga que implica una vuelta al mundo: “El barco está muy cansado, no hay una sola pieza de la que podamos estar seguros de que está al 100% a excepción de Conrad, pero él no es parte del barco. Bueno, a lo mejor ahora sí que es parte del barco, como yo. Pero él es el único que está en perfectas condiciones, no com o yo o como el barco. Aún así me encanta el barco, es prometedor, y vamos a mantenerlo hasta el final”.