Una gran fiesta de la vela ligera en el Abra
El XXI Trofeo José Luis Azqueta se decidió en dos bellas jornadas para la navegación con más de 200 regatistas de diferentes comunidades en las clases Optimist, ILCA, FEVA y Snipe
Las aguas vizcaínas del Abra volvieron a ser una formidable fiesta de la vela con el XXI Trofeo José Luis Azqueta de vela ligera, organizado por el Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club en el año su 125º Aniversario. Durante dos jornadas navegaron más de 200 regatistas vascos, cántabros y asturianos, que descubrieron una hermosa estampa con centenares de velas en los campos de regatas en el Abra interior y exterior. La pareja del Real Club Astur de Regatas formada por Aida Marqués de Faes y Carlos Fernández inscribieron su nombre como vencedores absolutos.
La definitiva prueba del domingo comenzó más tarde de lo previsto a la espera del viento. Los barcos de la clase ILCA y Snipe tuvieron viento del nordeste de 12 a 14 nudos en una interesante y espectacular jornada, y las decenas de embarcaciones de la clase Optimist y FEVA compitieron con viento del noroeste de 5 a 8 nudos. Se completaron en Optimist las tres mangas previstas en el día decisivo, tras las que Íñigo Jáuregui se proclamó campeón con mucha superioridad, tras imponerse en cuatro recorridos y ser segundo en los otros dos. Nicolás Bastard, del R.C.M.A.-R.S.C., y Maura Echarri, de Hondarribia, completaron el podio. Lukas Etxetxikia, del Real Club Marítimo de San Sebastián, fue el mejor en Optimist 2.
Ganadores absolutos
Por su lado, la pareja asturiana Aida Marqués y Carlos Fernández, del Real Club Astur de Regatas, confirmaron su favoritismo tras las seis pruebas de la clase FEVA, en la que acabaron por delante de los también asturianos Rodrigo Llanes y Miguel Ribera y de Jon Berástegui y Vera Aguirre, del club organizador. Aida Marqués y Carlos Fernández fueron los ganadores absolutos con cinco primeras posiciones y una segunda. Paul Emezabal, de San Sebastián, venció en ILCA 4 después de desbancar del liderato en la segunda jornada a Lorea Elduayen, de Hondarribia, con quien empató a siete puntos. Además, Martín Bueno, del Real Club Marítimo del Abra, terminó al final como vencedor en la emocionante clase ILCA 6 después de sus dos victorias en los últimos recorridos. Le siguieron de cerca el cántabro Jorge Campos, a solo un punto, y Gabriel Oraá, que pasó del primero al tercer puesto tras unas divertidas regatas en el Abra exterior. Por su lado, los vizcaínos Tomás Trueba y Tanis Rey-Baltar fueron los primeros al hacer pleno de triunfos en la clase Snipe, con Aníbal e Inés Herrero segundos y Carlos Morata y Javier Escalada terceros.
Tomaron parte en este XXI Trofeo José Luis Azqueta regatistas del Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club, Club Náutico de Álava, Club Náutico de Hondarribia, Club Náutico de Vitoria, Club Pakea, Real Club Astur de Regatas, Real Club Marítimo de Santander, Real Club Náutico de Castro Urdiales, Real Club Náutico de Laredo y Real Club Náutico de San Sebastián. La entrega de premios tuvo lugar en El Saltillo en medio de un gran ambiente con la presencia de José y Reyes Azqueta, hijos de José Luis Azqueta, quien da nombre a una de las pruebas referencia en el Cantábrico.
Trofeo espectacular
Retornó así a las aguas del Abra una prueba de referencia en esta modalidad, con la planchada del Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting de nuevo repleta de jóvenes regatistas y embarcaciones al lado de la Escuela de Vela José Luis de Ugarte. Participaron regatistas vascos, asturianos y cántabros en un campeonato que recordó a José Luis Azqueta, que fue presidente de este Club de Las Arenas entre 1993 y 1997, cuando se erigió en uno de los principales impulsores de esta especialidad en el País Vasco.
Este Trofeo estuvo organizado por el Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club y la Escuela de Vela José Luis de Ugarte, con la colaboración de la Federaciones Vizcaína y Vasca de Vela, el Ayuntamiento de Getxo, la Diputación Foral de Bizkaia, El Correo y WOR-60.
“Ha sido un Trofeo José Luis Azqueta espectacular en el que se han conseguido realizar la mayoría de las pruebas previstas en dos días muy diferentes. El sábado fue una jornada típica en el Cantábrico, dura, con chubascos y olas de tres metros; y el domingo ha salido un día primaveral casi de verano, precioso para la navegación de decenas y decenas de barcos que cada año vienen a esta regata”, destacó Eduardo García-Santamarina, director deportivo del Club organizador.