La inestabilidad del viento obliga a suspender la tirada del snipe santanderino.
En Santander la mañana del domingo acompañaba para realizar cualquier tipo de actividad deportiva, excepto la de la vela; el sol lucia radiante, pero Eolo no tenia ninguna gana de hacer su aparición estando la bahía como un gigantesco espejo si el mas mínimo moviendo en su superficie.
En estas condiciones las 12 tripulaciones que habían bajado al “Casetón” para prepararse para regatear, entre las que se encontraba tres nuevas incorporaciones a la flota, veían como se les venia encima la hora limite para dar la salida a la primera de las dos pruebas programada para la jornada.
Cuando todo parecía que la tirada no iba a ser posible es realizarla, sobre las 13 horas un perezoso nordeste comenzó a ir llenado la bahía con una ligera brisa que consiguió el que las velas que se encontraban izadas comenzasen a flamear
Ello propicio que rápidamente todas las tripulaciones que se encontraba en la explanada de Puerto Chico parejasen sus embarcaciones para botarlas por la rampa de practicos para dirigirse a losparamos del sur de la bahia, en donde el comité habia fondeado la motora con labandera de aplazamiento izada a al espera de que el veinto alcanzase un intensidad que premitise el desarrollo de la regata