El Ecuela de Náutica de Santander vence en la 1ª tirada del Trofeo Cyopsa Numero Uno
Comenzó el trofeo "Cyopsa Numero Uno" para la clase Snipe, que este año se desdoblara en dos trofeos del mismo patrocinador, el que se esta corriendo y que sera convencional y otro a determinar las fechas en las que se pondrá en juego unas velas para los vencedores, lo que le convierte en el mejor trofeo de la clase snipe desde hace muchas temporadas.
En este primer evento Cyopsa Numero Uno que comenzo el domingo once fueron las tripulaciones que a pesar de lo complicado del día – sin viento y con bajamar - acudieron a la cita con la competición, en la que lo mas interesante de la misma ha sido la botadura de nuevas embarcaciones a la cancha, lo que refleja la gran vitalidad del Snipe en Santander, esperando que durante las próximas jornadas se sumen muevas tripulaciones a la actividad de la flota santanderina que jornada tras jornada surge las aguas de la bahía de esta ciudad .
La hora programada con la regata coincidía con la bajamar, lo que suponía un esfuerzo añadido para los Snipistas como consecuencia de las condiciones en las que se encuentra la rampa de Puerto Chico cuando la bajamar coincide con la regata, a eso había que añadir la falta total de viento a la hora programada para las pruebas lo que obligo al comité a tener mas de una hora y media levantada la bandera de aplazamiento. Cuando el viento se entablo un poco, el comité monto el recorrido en la bocana de la bahía, ya que era el único sitio donde Eolo era un poco más estable, instalando un barlovento sotavento al que los participantes debían dar tres vueltas.
El emplazamiento del campo de regatas no podía provocar peores consecuencias a la navegación, ya que estaba situado en el lugar donde la correntada de la marea alcanza los 4 nudos de intensidad, cuando no más en algunos lugares del mismo. Esto marco la regata desde el principio, ya que era un verdadero rió en el que se realizaba la regata y lo peor de todo es que había un viento de lo mas inestable lo que hacia muy complicado el poder remontar la fuerte corriente, donde la elección de bordo resultaba definitivo ya que el escaso viento no daba lugar a rectificación alguna.
La salida fue valida a la primera y aunque hubo llamada individual, la tripulación que salio prematuramente corrigió su error y no tuvo más importancia esta llamada. La regata presentaba dos disyuntivas claras en cuanto a su táctica, o bien arriesgarse a cruzar la fuerte riada de la marea en busca de menos corriente en la costa norte, lo que implicaba un riesgo enorme de encontrar poco viento en ese lado, o bien virar y meterse de lleno en la correntada, pero con mas viento – siempre que este se aguantase lo que era una incógnita - La mayor parte de la flota opto por esta segunda opción y no les fue mal pues los de tierra tuvieron mas encalmadas que rachas en esta primera ceñida. La baliza de Barlovento la monto en cabeza la tripulación del Stab que opto por la canal. Los demás participantes sufrieron mucho para montarla ya que en sus cercanías el viento rolaba exageradamente en cada racha. En la empopada el Escuela de Náutica de Santander se coloco en cabeza y el Stab paso a la segunda plaza; la flota les sigue muy de cerca con el Patín, el Mojito, el Viperino y el Cohete en un pañuelo, mas retrasados el resto de los participantes. En la siguiente ceñida la decisión a tomar es similar a la de la anterior, o pasar la corriente o meterse de lleno en ella. Nuevamente los resultados fueron parejos para los de cabeza, siendo en esta ocasión los del Patín los que montaron barlovento en primer lugar no pasa lo mismo para el resto de la flota y las posiciones varían notablemente. En la popa las posiciones de la flota se mantienen de cómo montaron la boya y un error de los del Patín en el numero de vueltas al recorrido les hace perder la cabeza de la regata al no montar la baliza y dirigirse a la entrada, ocasión que aprovechan los del Escuela de Náutica para colocarse nuevamente en cabeza;. La flota monta muy junta. La ultima ceñida de la regata es aun mas complicada, pues al principio de la misma el bordo por la corriente tiene sus frutos, pero a la mitad del tramo el viento decae y los que se encuentran en la corriente no dan avante, sin embargos los que habían escogido el ir a tierra y que al principio estaban perdidos, al decaer el viento si podían remontar la menor corriente que circulaba por las cercanías de tierra con lo que salieron muy beneficiados. Tras una popa final, la clasificación fue:
1º Escuela de Náutica de Santander de Enrique García de Soto y Pablo Pelayo.
2º Patín de Javier Gutiérrez y Pablo Díaz.
3º Stab de Fernando Pereda y Juan Bats
4º Viperino de José Ramón Díaz Tejeiro y Carlos Losada
5º Cohete de José Ramón Diaz Tejeiro Jr y Adrián Carus
6º Mojito de Javier López Vázquez y Santiago Fiochi.
7º Aldebarán de Guillermo Bustillo y Jorge Navedo.
8º Aquí todos somos iguales de Chiqui García de Soto y Pedro Cospedal
9º Sarito de Federico Rodríguez y David Solana
10º Ahau de Guillermo Ramos y Leticia Prieto
11º Chardonnay de David González y Rosana García.
La llegada a tierra después de la regata fue aun mas complicada que la botadura, pues la rampa de varada estaba ocupada por zodiacs amarradas a la misma y que hacían difícil el acceder a ella, esta situación se viene repitiendo ultimamente con gran frecuencia, lo que supone una gran dificultad para poder atracar las embarcaciones de vela a la misma al no haber espacio para realizar la maniobra, a parte de poder provocar algun accidente por ello.
La próxima semana 10 tripulaciones de la flota de Santander se desplazaran a Gijón para participar en la regata organizada por el Club de Vela Sotavento en la que se darán cita las mejores tripulaciones de varias territoriales esperando la participación de más de 60 embarcaciones. Para la Ocasión el Club de Vela Sotavento organiza una Espicha en un lagar de sidra en donde se agasajara a todos los participantes y sus acompañantes, también el Club organizador invita a los regatitas al hotel los días que dura el evento.