Duro comienzo de temporada del Snipe santanderino, con victoria del Chiqui IV en el trofeo Mafias

Tras más de un mes sin poder navegar por falta de viento, en la tirada de hoy, que permitía, por fin, el comienzo de la temporada 2020 para la clase Snipe, Eolo sopló por encima de los 22 nudos mantenidos, trayendo rachas que superaban los 24, haciendo que la sensación térmica estuviese sobre los 3 grados; por si esto fuese poco, el viento formaba olas cortas en el interior de la bahía, las que anegaban las embarcaciones. Todo ello hacia muy complicado la permanencia en la mar a los participantes.

Lo único favorable de la jornada para la competición a Vela era que la pleamar coincidía con la hora de la competición, y sobre todo el que el viento soplase del NE, lo que al menos, permitía que las rachas no viniesen con grandes cambios de dirección; así y con todo, los participantes tuvieron que luchar durante todo la regata con las duras condiciones de viento, ola y frio que marcaron la tirada.

A pesar de lo complicado de las condiciones reinantes, cinco fueron las tripulaciones que acudieron a tomar parte en la tirada, haciéndose todas ellas a la mar.

Durante la navegación hacia el comité, que se había situado al fondo de la bahía, y ante las duras condiciones reinantes la tripulación del Raque Quit abandonó para evitar roturas y complicaciones , con lo que tan solo fueron cuatro las que realizaron el recorrido que el comité instaló sobre los arenales, consistente en dos vueltas al triangulo para evitar la popa.

La salida fue valida a la primera; saliendo el Larus por la bandera, mientras que el resto de participantes lo hicieron por la medianía de la línea.

A los pocos metros de la salida el Chiqui IV se amuró a Babor para navegar por la derecha del recorrido, mientras que el Larus, el Güemes y el Chiqui alargaron el bordo por la izquierda; lo que les perjudico al tener que luchar con las olas que formaba la marea contra el viento y que les anegaban sus embarcaciones.

A barlovento llegó destacado el Chiqui IV, mientras que el Güemes y el Larus llegaron muy juntos, montando primero el Güemes por haber conseguido el interior. Más retrasado lo hizo el Chiqui.

La navegación el primer largo fue espectacular como consecuencia de las grandes planeadas que se conseguían al surfear las olas, poniendo a prueba a las tripulaciones la navegación en este tramo para evitar los vuelcos. El Güemes, en una planeada sufrió un percance en su maniobra, retirándose de la competición.

El segundo largo fue un calco del anterior, donde las planadas fueron constantes de baliza a baliza.

En la segunda ceñida el Chiqui IV se destacó, mientras que el Larus mantuvo su ventaja sobre el Chiqui al paso por la baliza de barlovento.

En el primer largo de la segunda vuelta, el Chiqui IV colocó el tangón, mientras que el Larus y el Chiqui navegaron el tramo sin él

En la baliza del vértice el Larus tuvo problemas para virar, lo que propicio que el Chiqui se le acercase; siendo el último tramo una dura lucha entre estas dos tripulaciones que llegaron a ponerse a menos de una eslora la una de la otra en el último tercio del mismo, destacando la gran navegación realizada por la tripulación del Larus en este último largo, en el que defendió magníficamente su puesto durante todo el tramo, cortando la línea por delante del Chiqui, que no dejo de intentar en todo momento el poder rebasar a la tripulación del Larus.

J.F.M.J.O.