Yamamay en C1 y Gabriela Onofre en CII se hicieron con la costera del Trofeo M izaru de cruceros
Con una magnifica tarde para la practica de la vela, en la que el viento del NW de unos 12 nudos fue el protagonista, la flota crucero celebro la tercera prueba del prestigioso trofeo Mizaru sobre un recorrido costero de unas 20 millas
Costera a la que le sobro el ultimo tramo de navegación en el interior de la bahía santanderina, en donde el viento fue tan escaso que a duras penas gran parte de la flota termino antes de la puesta del sol, y que fue el que sentencio la regata para los barcos pequeños a los que la encalmada les dejo sin ningún tipo de posibilidades.
El recorrido consistió en una navegación con salida desde las inmediaciones del RCM de Santander para, dejando por babor la isla de Mouro dirigirse a la boya Eólica que se encuentra en las cercanías de la Virgen del Mar a unas 9 millas de Mouro, para desde allí, dejando esta vez por estribor Mouro dirigirse al la boya nº 3 de la canal de navegación de la bahía a la que había que dejar por estribor para luego navegar en demanda de la línea de entrada que nuevamente estaba en aguas próximas al Club.
Trece fueron los barcos que tomaron parte en la competición, si bien el Unico, el mas pequeño de todos, abandono al final al quedarse sin viento.
La salida que se dio a las 15 30 horas fue apretada, navegando toda la flota muy junta hasta la bocana del puesto, a partir de allí la flota se fue dispersando durante la navegación hasta Mouro tramo en el que aun se pudo mantener izados los spinnakers. Una vez montado Mouro la derrota hacia la boya Eólica, la que se distinguía perfectamente a pesar de las mas de 9 millas a las que se encontraba, fue de una ceñida de varios bordos, en lo que las roladas, que fueron constantes durante esta navegación, favorecieron a los que navegaron por la mar, siendo los grandes los que por su mayor eslora se adelantaron enormemente.
El Boro fue el primero en montar la marca de barlovento.
La navegación de vuelta hacia Mouro se realizo de popa cerrada hasta cabo Mayor, para luego hacerlo nuevamente de través hasta Mouro, en donde las tripulaciones tuvieron que arriar sus velas de popa para encarar la entrada a la bahía en una cenida a rabiar. En este tramo lo mas complicado fue remontar la fuerte marea vaciante que afectaba a la bahía.
La primera parte de la navegación en su interior se realizo aun con viento, pero cuando a partir de puerto Chico Eolo comenzó a mostrarse caprichoso dejando el fondo de la bahía sin apenas viento, rolando fuerte mente al norte lo poco que soplaba.
En estas condiciones el tramo desde la baliza nº 3 hacia el club se pudo realizar fundamentalmente por el efecto de la corriente vaciante, la que ayudaba a los participantes a dirigirse hacia la liena de entrada, pues la proximidad de tierra producía un sotavento muy perjudicial para la navegación a vela, siento este pequeño, e innecesario, tramo el que determino las posiciones, en el que los mas pequeños sufrieron enormemente en él, y todo el trabajos de mas de 19 millas de su navegación se vio frustrado por algo tan cantado como es la desaparición del viento al ocaso del día.
Tras la compensación de tiempos la clasificación oficiosa es la siguiente
1º Yamamay, clase I
2º Boro, clase I
3º Co yemaya, claseI
4º Gabriela Onofre, clase II
5º Salen, Clase I
6º Murphy, clase I
7º Marieta V, clase I
Hasta 13 clasificados