Unus de Luís Garcia Trigo gana la general del Trofeo Ramada Storax en una jornada con mucho mar y viento

Hoy finalizó en aguas de la Ría de Vigo y en la ensenada de Baiona, la V edición del Trofeo Ramada Storax, una regata que la firma portuguesa viene patrocinando en el último lustro con una elevada participación de embarcaciones, que supone en la comunidad gallega el arranque de la temporada de alto nivel.

Disputado a tres jornadas hoy culminaba la regata lusa con una última prueba costera, circunnavegando las Islas Cíes, pendiente del pasado sábado que no se pudo realizar por falta de viento. Hoy se dieron las condiciones, optimas, con mar y viento, del 200, que soplo con una presión de 18 nudos en alguno de los tramos. Popas en potencia por la cara atlántica del archipiélago de Cíes, y ceñidas veloces en el litoral interior de la Ría de Vigo. La salida se dio a las 15.00 horas, con puntualidad británica, desde de las inmediaciones del Cabezo de San Juan en pleno corazón de la ensenada de Baiona, dejando las balizas de Carallones, La Negra y el islote Boeiro a estribor, el mismo costado con los altos acantilados de las Islas Cíes, virando en su cara norte , el Cabalo y bajando hacia la Sur, entrando en Vicos.

Gran día en tiempo real para el Xplosion, de Carlos Mendonça, que llevaba a la rueda a Laureano Wizner, para el Pairo, el Ourense, o el Txole, con Gonzalo Araújo.

Sin embargo, el gran triunfador del día fue el Unus, de Luís García Trigo, que ganó la general global del Trofeo Ramada Storax, gracias a su regularidad. En ORC 0-1, fusionadas las divisiones, el podio dorado se lo llevó el Mummy, de Rui Ramada, que navega bajo la grímpola del Monte Real Club de Yates de Bayona, organizador de la cita náutica. En ORC 2, Menudeta, de Francisco Carrión, del Real Club Náutico de Vigo, y en ORC 3-4, también unidas, Arroutado II, de Rodolfo Rodríguez, del Liceo Marítimo de Bouzas.

El Somni Primero, de Javier Santander, sufrió la rotura del palo de su barco, en un momento apretado tras el paso de la boya de desmarque donde los barcos navegaban muy agrupados, cargando la racha de viento en esos instantes y soportando sus velas la carga directa, sin poder arribar por el compromiso con los otros barcos con riesgo de colisión.

La entrega de premios se celebró en el Salón Noble del Club de Yates, un acto presidido por su Vicecomodoro, Alejandro Retolaza; Ramón Ojea, Comodoro del Real Club Náutico de Vigo, colaborador en la Storax; y Manuel Sarmento, Diretor de Operaciones de Ramada.