Monólogo en los vencedores de las regatas de crucero en Santander
La jornada se vio empañada por la poca participación como consecuencia de no llegar a la salida parte de asiduos participantes en las regatas de cada semana.
Para la jornada en el mástil de señales del club aparecía izada la bandera L sobre la de inteligencia, la que según un correo que la organización había enviado a los participantes que tienen correo electrónico, quería significar que la regata se darla desde la Josefa en el Abra del Sardinero.
A las 1430 cuando los participantes se dirigían a los atraques de sus embarcaciones, el viento, tanto en la bahía como en el Sardinero no pasaba de los dos nudos. A pesar de ello varias tripulaciones largaron amarras y se dirigieron a la Zona del Sardinero, en donde la Josefa, había fondeado, en esta ocasión no estaba cerca de la playa, sino que se encontraba mas separada de ella.
Las flota de crucero santanderina, no mantiene amarrada la totalidad de sus embarcaciones en Puerto chico, además de por no haber sitio en dichos atraques, porque muchas de sus unidades tienen un calado superior al que presenta ese lugar, y por tanto amarran en el Puerto deportivo de Marina del Cantábrico, sito al fondo de la Bahía, lo que les supone un hándicap enorme a los que amarran en Marina del Cantábrico a la hora de tomar parte en las regatas que se celebran en el abra del sardinero. De hecho en la jornada de hoy han sido varias de las siempre asiduas a la competición las que se han quedado sin poder tomar parte en la jornada por no llegar a la salida cuando esta fue dada. Problema que podría solucionarse con modificar el turno de la salida de las demás embarcaciones que tienen regata los sábados, o simplemente retrasando la salida para que todos los participantes lleguen a la salida, pues al fin y al cabo son regatas sociales para los socios del RCMS. Al final en la tirada de hoy solo han tomado parte 5 tripulaciones, lo que dice muy poco de los responsables de la organización.
Cuando el viento alcanzo los 5 nudos, el comité largo la señal de atención para la flota crucero, cogiendo a una gran parte de los cruceros muy alejados de la línea, por lo que debido al escaso viento que reinaba en esos momentos pocos fueron los que pudieron tomarla debidamente. El recorrido consistió en un barlovento sotavento con dos vueltas, con la particularidad que la baliza de barlo era de caña, por lo que una vez mas era muy difícil de ver como consecuencia de la mala visibilidad de la jornada, otra cosa eran las de sotavento, que eran balizas inflables, las que se localizaban sin ningún problema.
La regata , como consecuencia de la salada, careció de toda competitividad al salir separados enormemente todos los participantes.
El campo estuvo marcado por una tendencia a rolar a la izquierda durante la primera vuelta, terminando por hacerlo por más de 15 graso en la segunda, lo que produjo un distanciamiento aun mayor entre los escasos participantes siendo la ultima popa de un solo bordo.
Sobre el RD 62/2008
El que cualquier día se va a producir un accidente que tendrá graves consecuencias nadie lo pone en duda, lo malo es que hasta ahora nadie se preocupa de las condiciones de seguridad y al menos cumplir con lo establecido en las normas que regulan la práctica de la vela, tanto en competición como en las escuelas, no solo en la vela infantil, que es la mas vulnerable, sino en la vela ligera y en los cruceros, peros sobre todo en las escuelas de Vela que abundan en nuestra ciudad.
El pasado miércoles, unos alumnos de la Escuela Técnica Superior de Náutica, pertenecientes al del Club Náutico Universidad de Cantabria, cuando navegaban, con dos de los Snipes que la Escuela Técnica posee, sin ningún tipo de embarcación de salvamento que les custodiase, uno de ellos volcó en la canal de navegación de la Bahía de Santander cuando navegaba por la canal un cochero de los que nos visita asiduamente, el cual tiene que navegar por ella una gran velocidad, de más de nueve nudos. En esta volcada, que tuvo lugar en la derrota del cochero, el Snipe perdió la caña del timón, lo que le imposibilitaba ningún tipo de control sobre la embarcación. A duras penas el otro Snipe consiguió, remolcándola, apartar un poco de la canal a la embarcación siniestrada, usando como cabo de remolque a uno de los náufragos, el que hacía de unión entre ambas embarcaciones. Ante la gravedad de la situación y tras percatarse de la misma unos trabajadores de la obra de la ampliación del CEAR, dieron parte del accidente a los responsables del centro, los que pusieron en el agua dos neumáticas y trajeron a tierra a los náufragos, a los que les sacaron de un gran apuro. La corporación de Prácticos ha preparado una denuncia sobre lo sucedido ante la Autoridad Portuaria, al poner en riesgo la navegación en la bahía santanderina.
Por otra parte la escuela de Vela de Marítimo, cada semana está sacando a navegar por la zona de las Quebrantas a sus alumnos de Opimist, haciéndolo con una escasa dotación de embarcaciones de seguridad, las que además solo son tripuladas por una persona, lo que el día menos pensado podrá dar lugar a un hecho, al menos desagradable, por la nula observación de las mas mínimas condiciones de seguridad
J.F.M.J.