Portada ›› Vela ›› Regatas ›› Malalo Bermúdez, con el “Solventis”, el patrón que puede entrar en la leyenda: “En la Costa de la Vela he perdido muchos Rías”

Malalo Bermúdez, con el “Solventis”, el patrón que puede entrar en la leyenda: “En la Costa de la Vela he perdido muchos Rías”

Malalo Bermúdez, con el “Solventis”, el patrón que puede entrar en la leyenda: “En la Costa de la Vela he perdido muchos Rías”
  • Nadie ha ganado cuatro títulos en fila y el caña del “Solventis” se ha impuesto en las tres últimas ediciones
  • El X-37 de los hermanos Moro, un diseño danés de 2004, se ha impuesto en seis ediciones (2006, 2007, 2009 y de 2012 a 2014)
  • “En la cuarta etapa puede pasar de todo porque esa costa es muy caprichosa”, subraya el patrón pentacampeón del Rías

Palabras y frases clave: historia, punto de encuentro, romanticismo... y la Costa de la Vela. "He perdido muchos Rías en la Costa de la Vela, de vuelta el último día".

 

Quien así se expresa es Manuel Bermúdez de Castro, "Malalo", el único patrón de los cerca de noventa veleros –aún está abierto el plazo de inscripción y sigue el goteo– que en esta 52 Regata Ribeiro - Rías de Galicia tiene una cita con la leyenda del 13 al 16 de agosto (Vigo-Sanxenxo-A Pobra-Combarro-Vigo). Pregunten por cualquier otro, pero la respuesta será la misma: es tiempo de Malalo.

 

En una regata que ha incorporado a su imaginario nombres como los de Pedro Campos, Javier de la Gándara, José María Lastra, el luso Serra Riveiro, Gonzalo Araújo, Helmut Bande, Alberto Viejo, José Luis Freire o Guillermo "Willy" Alonso, "Malalo" y el "Solventis" se hallan a menos de una semana de reventar la historia del Rías. Mejor: de hacer añicos la Historia. Si vence con el “Solventis”

 

(MRCY Baiona), será el único patrón en más de medio siglo de la prueba en sumar cuatro victorias en fila.

 

Nadie hasta ahora lo ha logrado. Todo, claro, siempre que se imponga en su clase. "No creo que seamos el rival a batir porque entre nosotros no hay rivales. El rival son las propias rías, porque te puedes quedar en cualquier sitio", dice el coruñés. Fuera caretas y anàlisis apriorísticos. Malalo habla con la pasmosa tranquilidad de quien ha vivido mil batallas navales, maniobras ganadoras y encalmadas que le arrebataron el triunfo. "Si la ganamos será espectacular, pero ni somos líderes ni rivales a batir. Las rías son como una amante, cariñosa y traicionera".

 

El pasado fin de semana el X-37 navegó en Aguete. Una tradición acudir a la ría de Pontevedra como paso previo para el Rías. "Es nuestro reciclaje, nos sirve para poner el barco a punto y ver lo que falla. Además esa regata está muy bien organizada", afirma.

 

El X-37 es un diseño danés de 2004. Cuando lo compró apenas había unas cuantas unidades, nueve en toda España y de ellas cinco en Galicia. Acertó. "La apuesta ha salido bien. No está tan clara la vela de crucero como para gastar tanto dinero en ella. Tener un barco más grande para luego no intentar hacer las cosas bien es absurdo". Y recuerda que en el "Solventis" "somos amateurs". Hay “Solventis” para rato, “un caso excepcional”, como lo define Malalo. Y el patrocinio también. Sus armadores son los hermanos Moro, Alberto y Pablo, y el barco disputa el Rías con ese nombre desde 2008.

 

Como “Solventis” se ha impuesto en cuatro oportunidades (2009 y de 2012 a 2014), siempre con Malalo, habiendo vencido también en 2006 como Turismo Rías Baixas, patroneado por Javier de la Gándara, y en 2007 con otro sponsor, Nationale Suisse, y

 

Bermúdez de Castro a la caña. “Hace tiempo que dejó de ser patrocinador para convertirse en un buen amigo. Apoya casi por romanticismo, porque trabaja en un área de negocio donde no necesita publicidad”, valora Manuel Bermúdez de Castro. Ningún otro barco ha ganado el Rías en tantas ocasiones.

 

Para Malalo, esta regata es “un poco especial” porque la contempla desde un prisma diferente. “Nos conocemos todos en la tripulación y el Rías es un punto de encuentro para nosotros más que una competición”.

 

¿Y dónde la disfruta más? “La etapa más bonita era en la ría de Vilagarcía, por las boyas, las bateas… técnicamente era más exigente”, señala, mientras que la jornada final es “bonita y difícil, puede pasar de todo en una costa muy caprichosa” en la que el viento juega malas pasadas.

 

Malalo cree que con el paso de cinco a cuatro etapas tomado hace dos años la regata “nos viene mejor, pero me gustaba más de cinco días, aunque para el gran público es mejor así; antes siempre era más abierta y ahora cuando alguien se sale en una etapa ya se queda fuera”. Ahora es una regata para “improvisar menos y estar más vigilante de no fastidiarla casi que de ganar”, concluye.

 

Hace unas semanas el “Solventis” disputó el Mundial ORC en Barcelona. Acabó cuarto aunque empezó como líder en su clase (ORC C). “Nos quedó una sensación agridulce. No éramos consistentes como para ganar; somos peleones pero había barcos de regata y no de crucero y con tripulación profesional, palos de carbono… Nos supo a poco pero disfrutamos”, resumió. Y tanto: ganaron la Copa Corinthian, es decir, la de mejor tripulación no profesional.