La tripulación cántabra del Boro triunfa en aguas gallegas
El evento al que se desplazo la tripulación cántabra es el más importante de los celebrados en el norte de España, contando para su desarrollo con 5 regatas celebradas del 12 al 16 de agosto en las diferentes rías que conforman la costa gallega en el que no hay posibilidad de errores al no existir el descarte de ninguna de las celebradas, añadiendo a esto la dificultad de navegar en estas difíciles y maravillosas costas, lo que hace muy difícil el triunfo a las tripulaciones foráneas.
En la regata tomaron parte 120 embarcaciones con la participación de más de 900 deportistas, entre los que se encontraban gran parte de las mejores tripulaciones españolas y portuguesas de la clase crucero.
El Boro fue el único barco cántabro que participo en esta prueba, siendo patroneado por su armador Salvador Albiñana, que conto para este evento con la colaboración de Chiqui como táctico y coordinador, Monchi como líbero, Jorge como Piano, Joserra Jr.como trimer de mayor, Mariano como palo, Echeve como proa y Carlos y Javi como trimers de foque y spy.
La tripulación que estuvo perfectamente conjuntada durante todo el campeonato, supo alzarse con la victoria a pesar de lo difícil que se lo puso el comité en la penúltima jornada, donde la aplicación conflictiva en la determinación del rating de compensación les coloco en segunda posición de la general a falta de una regata, en un evento donde no era posible el error al no existir descarte, lo que dio más valor al triunfo final.
La tripulación cántabra sorprendió desde la primera jornada, la que consistió en una navegación costera de Vigo a Combarros, en la que los participantes cubrieron 19,3 millas náuticas y que estuvo plagada de bajos en las proximidades de la costa a la que tenían que acercarse los participantes para remontar las fuertes corrientes en contra.
En este primer día se tuvo que aplazar la salida por más de una hora a la espera que el viento hiciese su aparición en la ría de Vigo. Cuando lo hizo, soplo por encima de los 22 nudos, levantando olas de más de dos metros a la altura de las Islas Cies y que produjeron que una de las embarcaciones participantes rindiese su mástil.
A falta de menos de milla y media para cortar la línea de entrada el viento comenzó a faltar, bajando su intensidad hasta los 2 nudos y rolando 180 grados, lo que obligo a los participantes a emplearse a fondo para terminar la prueba.
En estas complicadas condiciones los del Boro se impusieron con una clara ventaja a los demás participantes, obteniendo la victoria con más de 5 minutos de ventaja sobre el segundo clasificado de esa primera prueba.
En la segunda jornada los participantes realizaron una navegación entre Combarros y Pobla do Caramiñal, en la que cubrieron 21,5 millas de navegación, pasando de la ría de Pontevedra a la de Villagarcia de Orousa, haciendolo por el norte de la isla de Ons.
La navegación fue la más complicada del campeonato, pues aparte de las dificultades que esta peligrosa costa ofrece con sus bajos, la mayor parte del recorrido se realizo con una espesa niebla que no permitía ver mas allá de 100 metros, a la que acompañaba un escaso viento que apenas hacia navegar a las embarcaciones.
En estas condiciones la tripulación del Boro consiguió una meritoria tercera plaza, la que le mantuvo en la cabeza de la clasificación con un amplio margen de 4 puntos sobre su más inmediato seguidor en la tabla
Para la jornada que suponía el ecuador de la competición la navegación se realizo dentro de la ria de Villagarcia, con salida en la Pobla del Caramiñal, en la margen norte de la ría, y entrada en la Grove tras realizar un recorrido en el interior de la ría, navegando las tripulaciones en esta prueba 17,3 millas.
Esta fue la etapa más técnica del evento al ser la fuerte corriente que afecta a esta ría la mayor dificultad que tuvieron que sortear los participantes, a esto se unió la navegación entre las bateas de mejillones que inundan los márgenes de la ría y la fuerte lluvia que no dejo un solo instante de caer durante la competición y que venía acompañada de un viento de 20 nudos y mar llana.
Los del Boro realizaron una magnifica navegación dando una lección de táctica y maniobras, terminando en la segunda posición a menos de un minuto del vencedor, que conocía perfectamente esta difícil ría.
Esta clasificación le supuso mantener el liderazgo con un margen de 8 puntos, a falta de dos jornadas para terminar el evento.
La cuarta jornada empezó con problemas, pues la hora de salida de las embarcaciones del puerto coincidió con la bajamar y los barcos mas grandes quedaron embarrancados cuando quisieron dejar el pantalán. Esto obligo a la organización a aplazar la salida por más de hora y media, hasta que los barcos que habían embarrancado tuvieron suficiente agua bajo su quilla para abandonar el puerto
El recorrido se celebro con una navegación de 17,5 milas entre el Grove y Sanxenxo , con paso obligado por Ons y el faro de Mourisca.
En esta ocasión el viento soplo con escasa intensidad, entre 5 y 10 nudos, con una navegación de ceñida en la salida de la ría, para navegar la mayor parte del tramo en popa y terminar en un través.
En esta jornada el Boro pago mucho su enorme peso durante la salida del la ría de Pontevedra, consiguiendo, a base de esfuerzo, alcanzar a sus competidores durante la popa, lo que le permita mantener su liderazgo, pero una mala determinación del viento por parte del comité le clasifico en la decima posición, la que le mando a la segunda plaza de la general, a un punto del barco que paso a liderar la flota en esta jornada y con tan solo dos puntos de ventaja sobre su inmediato perseguidor, con lo que la ultima jornada era definitiva para la determinación de la tripulación que se alzase ganador de este evento
En estas condiciones se dio la salida para la última regata del campeonato, en la que la navegación de 17,3 millas transcurrió entre Sanxenxo y Vigo, pasando de la ría de Pontevedra a la ria de Vigo.
La regata estuvo plagada de dificultades desde su inicio, con un viento que fue subiendo de 7 a 18 nudos en el tramo de la ría de Pontevedra, a lo que se unió una espesa niebla a la llegada de la flota la costa, en donde los barcos con opción al triunfo navegaban en un puño, alternado sus posiciones en función de lo que arriesgasen en acercarse a la misma, y en la que los locales contaban con la inmensa ventaja de su perfecto conocimiento de esta siempre difícil navegación entre los bajos que pueblan la margen de la ría a los que la intensa niebla cubria.
A pesar de estos inconvenientes, la tripulación del Boro arriesgando en la costa se coloco a la cabeza de su contrarios durante a bajada en demanda de Cabo Home, el que marcaba el comienzo de la navegación hacia la entrada final situada en las cercanías del RCN de Vigo a unas 6 millas del cabo.
En las cercanías del mismo el viento amaino drásticamente y el paso del cabo fue un suplicio para todos, en donde el Boro volvió pagar su enorme desplazamiento en favor de las embarcaciones más ligeras que iban en su grupo y que pudieron remontar más fácilmente el cabo.
Aun con eso, los del Boro fueron terceros en la regata, con lo que se hicieron con el triunfo final con una puntuación de 19 puntos, 5 de ventaja sobre la tripulación portuguesa del Xplosión que fue segunda y sumo 24 y 7 sobre la del Castrosua que termino terceros con 26.
Con esta victoria el Boro es la primera embarcación cántabra que inscribe su nombre en el palmarés de este evento, en el que se dan cita las mejores embarcaciones y tripulaciones del norte de España