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La caída del viento penalizó al crucero santanderino.

La caída del viento penalizó al crucero santanderino.

Con una tarde en la que el viento del NNW no pasaba de los 6 nudos y que fue amainando a medida que pasaba la tarde, la tirada se realizó en el interior de la bahía, en la que en vez de establecer un recorrido la viento, como a la otra clase que navega los sábados, para los cruceros se ordenó el recorrido nº 8 de programa de regatas

En el que la salida, que se dio desde el Club, había que hacerse con viento de través, con lo que las distintas esloras de los participantes complicaban el control de las mismas en esta complicada maniobra como estaba tirada la línea; con lo que alguno de los participantes estuvieron a punto de abordarse. Siendo incomprensible que se sigan dando las salidas a todas las clases a la vez, lo que da lugar a situaciones como las que tuvieron lugar en el salida de esta tirada del crucero; por otra parte, la salida en conjunto de embarcaciones de 40 pies con otras de 6 metros no tiene ningún sentido; ni por la distinta maniobrabilidad de estas, ni por qué unas clases no compiten con las otras, sino que cada una los hace con las de su clase.

Siendo la salida una de las maniobras más importantes de la regata, con la salida todas las clases a la vez, y con la línea tarda de forma que el viento entre por el través, los barcos de más eslora perjudican completamente a las demás, máxime cuando las salidas dan lugar a una navegación a un desacuartelar en demanda de la primera baliza, que se convierte en un desfile sin posibilidad de maniobras, como ha sucedido en la tirada del sábado.

Con el recorrido que se estableció para la tirada del Crucero se premiaba a las embarcaciones que tienen Genaquer; algunos le largaron apenas cortaron la línea de salida, mientras que los que tiene Spy no lo pudieron hacer hasta montar la baliza nº 12 de la canal, con lo que no había forma de competir.

A partir de la boya nº 12, hasta la toma de la primera baliza, situada en la canal del Astillero, se navegó con viento portantes, que pasando por un través cerrado, terminaron el tramo navegando en popa cerrada antes de montarla.

La navegación en demanda de la segunda baliza del recorrido, situada en la bocana de la bahía, fue de ceñida de tres bordos hasta montar la boya nº 12, para desde ella hacerlo a un desacuartelar hasta la nº 10, y desde allí navegar, con cada vez menos viento, de través cerrado hasta montar la baliza nº 2 del recorrido, con gran ventaja para los embarcaciones con genaquer.

Con la caída del viento, y la marea bajando, se acortó el recorrido a una sola vuelta, siendo el último tramo de ceñida con dos bordos. Con lo que, una vez más, la jornada se vio limitada a una complicada navegación en la que las polares de las embarcaciones fueron las que contaban, afortunadamente con el acortamiento se pudo terminar con luz.

Las regatas de crucero dependen de los rating de cada embarcación para poder otorgar la clasificación; desde hace unas semanas no se están publicando las mismas, con lo que es imposible el conocerlas.

J.F.M.J.O.