Kirios I y Yamamay vencedores en sus respectivas categorías en la regata de cruceros de Santander
La fría tarde en la que viento del norte hacia descender drásticamente la temperatura, produciendo una sensación termina de unos 3 grados, no fue suficiente para amedrentar a las tripulaciones de cruceros para tomar parte en la competición.
Nueve fueron las que se dieron cita en la salida para realizar el recorrido nº 9,2 del programa de regatas. Nuevamente la elección del mismo no fue la más afortunada, ya que el viento del norte, nornordeste obligaba a los participantes a navegar gran parte del mismo en rumbos de desacuartelar y ceñida de un solo bordo, mientras que el resto de la prueba se desarrollaba con vientos portantes, lo que una vez más convirtió a la regata en un desfile de barcos.
El recorrido como es habitual en los cruceros santanderinos se celebro en la bahía y en el abra, por lo que nuevamente fueron decisivas para la clasificación las complicadas condiciones reinantes en la bahía, en la que el viento del primer cuadrante rolaba más de 30 grados, oscilando la intensidad del mismos de los 2 nudos a los 12 en instantes. Siendo la parte más dificultosa la del primer tramo, en que las tripulaciones tuvieron que luchas con una correntada entrante de más de 4 nudos y un escaso viento que les obligaba a navegar por el centro de la canal, donde la intensidad de la corriente era máxima.
En estas condiciones, la salida fue valida a la primera, saliendo toda la flota en un pañuelo, desde los primero metros se adelanto el Yamamay, no perdiendo la posición en ningún momento de la prueba, incrementando poco a poco la distancia sobre sus perseguidores.
Siendo a partir de la toma de la segunda baliza, cuando fue aumentando su ventaja, llegando destacado a la entrada.
Una vez mas y como cada semana,, l omas complicado fue la localizacion de las balizas con la pequeña bandera roja, si tuviesen que localizarla los que se empeñan en mantener este sistema de balizamiento, otra cosa veriamos en el agua.
Lo que no se entiende es como la clase crucero no navega en el abra del Sardinero cuando en este lugar se celebran regatas para otras clases, está bien que no lo haga,’ por problemas de calado de sus barcos más grandes, cuando se dan recorridos al viento en el interior de la bahía, pero cuando la Josefa se desplaza al abra, no tiene sentido que los cruceristas tengan que sufrir este tipo de recorrido, que convierte a la competición en un desfile.
Con lo que el orden de entrada oficioso, s.e.u.o., es el siguiente:
1º Yamamay, 2º Boro,3º Coyemaya,4º Saudade,5º Murphy,6º Mecaguen. 7º Karen V, 8º Kirios,9º Don Juan