El buen tiempo se alía con los cruceros santanderinos.Yamamay y Gabriela Onofre en su línea
Que en diciembre tengamos para practicar la vela un día tan esplendido como el que se ha disfrutado en Santander no es habitual, en la regata de cruceros en la Bahía de Santander toda la meteorología se conjugo para que la Vela fuese una fiesta.
Pues bien, hoy una vez más los cruceros santanderinos perdieron la oportunidad de regatear con estas magnificas condiciones de sol, viento y mar, ya que se les impuso para su tirada uno de los anacrónicos recorridos del programa de regatas, determinándose uno de los que menos aportan a la competición, el 9,2. Sin embargo otra clase, la J80, disfruto de una magnifica jornada de regatas en el abra del Sardinero, donde el viento del NE era constante, soplando con más de 13 nudos de intensidad, levantando apenas las olas suficientes para planear en las empopadas. Los Cruceristas santanderino entienden que cuando los J80 navegan en el interior de la bahía ellos no pueden regatear en su mismo recorrido, al no haber agua en los arenales del sur de la bahía para poder navegar sobre ellos, pero lo que no entienden es que cuando los J80 salen al abra, los cruceros no salgan con ellos a regatear en el mismo campo de regatas, lo que además no tiene ninguna explicación el que no se haga e esa manera. A la hora programada se comenzó el procedimiento para la tirada de hoy sobre el recorrido fijo nº 9,2 del programa de regatas, recorrido que además de estar obsoleto es uno de los que menos aportan a la competición, ya que gran parte del mismo se realiza a rumbos directos, y los que tienen viradas, tienen un bordo completamente marcado, del cual no te puedes apartar. En esta tirada tomaron parte 7 tripulaciones, lo que sigue marcando la falta de interés que producen la competición en esta clase, a lo que desde luego contribuye de forma incuestionable la falta de un Capitán de Flota que estimule a los cruceristas santanderinos, ya que sin esta figura será imposible que la flota se anime a participar, incluso esta podrá llegar a desaparecer en un futuro no muy lejano. La salida fue valida a la primera siendo esta para los del Yamamay y los del Único, que la tomaron en sobre la línea en las cercanías de tierra. Los demás salieron también en la línea pero más cercanos a la baliza, Al estar la marea subiendo con un alto coeficiente, la navegación de la flota trascurrio, como mandan los cánones, dando bordos cortos pegados a tierra para evitar la fuerte corriente en contra por la canal. Pronto las esloras se fueron imponiendo y los participantes comenzaron a distanciarse unos de otros, haciendo la regata todos muy separados entre sí, careciendo de todo interés para los participantes los tramos que tuvieron que soportar para realizar el recorrido. Como ocurre siempre con este tipo de recorridos, los que hoy hemos tomamos parte en la regata tuvimos que competir en dos condiciones completamente distintas, una la que se da en la bahía, y otra las que imperan en el abra. Pero sobre todo los barcos pequeños tuvimos que parecer, como siempre, la caída del viento en la navegación de entrada a la bahía, con lo que cualquier tipo de competición queda desvirtuada por completo. Tras esta magnífica tarde de regatas perdida, la clasificación ha sido: Clase II: 1º Gabriela Onofre, 2º Kirios, 3º Único Clase I: 1º Yamamay, 2º Futura Sails, 3º Murphy, 4º Karen V J.F.M.J.