El Salen III se hizo con el trofeo Restaurante Bajamar

La celebración de la regata inversa Restaurante Bajamar ha constituido un éxito de participación, siendo 17 las embarcaciones que han tomado parte en el mismo, rebasando con creces esta participación a la de los 6 que tomaron parte la semana pasada en el campeonato de Cantabria.

Este formato de competición tiene la particularidad de que en la salida se compensan los tiempos calculados para la realización de la prueba por lo que la entrada se realiza en tiempo real.
En esta oportunidad el comité publico las horas de salida de todos los barcos de la flota, incluso de barcos que no se han inscrito en esta temporada, lo que contrasta con lo ocurrido en la temporada pasada en la que barcos que navegaban durante todo el año no pudieron tomar parte en la regata inversa a Laredo por carecer del tiempo para su toma de la salida.

El recorrido a realizar para la ocasión fue el 7 acortado, con la variante que la entrada era en la bocana del puerto deportivo de Camargo en vez de la habitual frente al Club, con una navegación en el abra del Sardinero consistente en montar una baliza a 0,7 al NE de la isla de Mouro para dirigirse a la fondeada en la ensenada de los Molinucos para desde ella arumbar al Puerto Deportivo de Camargo, respetando en la navegación en el interior de la bahía las boyas de la canal de la misma a partir de la nº 8 hasta llegar al Puerto Deportivo.

La salida se fue dando a la hora prevista para cada embarcación, siendo muy pocas las que cortaron la línea a su debido tiempo.
Todas lo hicieron con sus velas de popa largadas, ya que hasta la 1 baliza la navegación era de popa redonda
La navegación en el abra del Sardinero proporciono una dura lucha entre los J80 que eran los únicos participantes que navegaban con un rating parecido. En este tramo los del Granuja se colocaron a la cabeza del grupo aumentando la ventaja durante todo el tiempo que duro la navegación en aquel tramo.
El Atlantis y el Mushungu defendieron perfectamente su posición hasta la entrada en la bahía, en donde la encalmada del Palacio les dejo a los pies de los caballos del resto de la flota, sobre todo de los J80 a los que la navegación de aleta hasta ese momento les coloco a la par de esos dos cruceros.

La encalmada de Palacio rompió la competición, anulando todas las posibilidades a los barcos pequeños, que veía, impotentes, como su ventaja se iba esfumando y como sus perseguidores se colocaban a sus costados, cuando no les rebasaban sin problema alguno. A esto se añadió la complicada navegación para realizar la entrada en la bahía, siendo este tramo el que marco las diferencias, sobre todo para los barcos pequeños a los que les costaba un triunfo el remontar la vaciante.
La flota para encarar la entrada se dividió en dos grupos, lo que se pegaron a punta Rabiosa en busca de menos corriente vaciante y los que se arriesgaron pos la zona norte de la bahía. Estos últimos fueron los más favorecidos colocándose por delante de sus rivales.
La victoria fue para los del Salen III que ni tan siquiera necesitaron largar su genequer en el tamo del Sardinero, colocándose al mando de la flota en el interior de la bahía a la altura de Puerto Chico, lugar que mantuvieron hasta cortar la línea de entrada, lo que hicieron con mas de un minuto de ventaja sobre su mas inmediato seguidor, el Verigüeto el que supero por escaso margen el Saudade, cuarto entro en Compesca, quinto el Granuja, sexto el Finanzas, séptimo el Mushungu, octavo el Kirios, noveno el Atlantis, décimo el Murphy.
En esta ocasión una embarcación inflable acompaño a los participantes, aprovechando la oportunidad para ir recogiendo las balizas a medida que pasaba la ultima tripulación participante.
Tras la terminación de la regata el restaturante Bajamar obsequio a los participantes con un magnifico ágape, procediendose al final del mismo a la entrega de los trofeos a los vencedores

J.F.M.J.