El Grifo se hace con el Gran Premio Colón – Poio terra de navegantes.

El día amaneció nublado, con viento estable del sur de 20 nudos de intensidad. Las previsiones apuntaban que a partir de las 13:00 las condiciones de viento subirían, y así fue. Con los barcos preparándose en tierra para salir al agua, algunos anemómetros marcaban ya rachas de 30 nudos con estables de 25. Toda la flota se preparaba para el esfuerzo que se les presentaba y salían al agua con tiempo para poner a punto su maniobra, su trimado y calentar a su tripulación.
Tras el bocinazo de salida, esta vez limpia, las embarcaciones se dirigieron rumbo al puerto de Marín para salir fuera de la ría. Otra vez el OZOAQUA de JUAN CARLOS PÉREZ OLMEDO se posicionó al frente de la regata. No obstante, en las cercanías de la primera baliza de virada (Morazán), un problema con la vela mayor le obligó a navegar solo con la vela de proa el resto de la regata, haciendo que perdiese toda opción a ganar la regata.
Además del OZOAQUA, fueron muchos los barcos que sufrieron daños. El JOTITI de Oscar Torres rompió el carro de la mayor, el LOBEIRA CHICA de Alberto Figueira deslaminó también la mayor, y otros barcos sufrieron daños y roturas. Pocos fueron los barcos que se atrevieron a izar el spi, con unas condiciones tan duras, el manejo de esta vela se hace muy técnico.
El recorrido dio comienzo en Combarro, con destino a la baliza de Morrazán para nuevamente regresar a Combarro. En las inmediaciones del puerto se situaron dos balizas tal que los barcos tenían que hacer un pequeño recorrido, haciendo la regata mucho más visible al público.
Con todos los participantes ya en tierra, el Club Náutico Combarro agasajó a los regatistas con un ágape para reponer fuerzas tras la dura jornada. En la entrega de premios estuvo presente Manuel Villaverde (presidente de la Federación gallega de vela), Luciano Sobral (Alcalde del ayuntamiento de Poio), Margarita Caldas (concejala de deportes), Alberto Figueira (Presidente del club náutico Combarro) y Manuel Martínez (gerente del puerto deportivo de Combarro). El ganador del ¨Gran Premio Colón – Poio terra de navegantes¨ fue para el ¨Grifo¨ de Francisco Freire. Mención especial tuvieron los dos últimos clasificados de la general, cuyo esfuerzo por finalizar la regata fue reconocido con una pata de jamón serrano.