Boro y Gabriela Onofre vuelven a mandar en la 2ª tirada del santanderino RAECY

A la hora de la salida del Puerto deportivo de Camargo para dirigirse a la regata, mas de 10 embarcaciones de la clase crucero partían del puerto para disfrutar de un estupendo día de navegación, otras tantas tripulaciones navegaban ya por la bahía; Es una pena que casi esta veintena de crucero no participen en las regatas, ya que con ellas las pruebas serian mas de treinta las embarcaciones que compitiesen en las mismas, lo que haría que las regatas fuesen mucho mas apasionantes y amenas.

La no participación de tan elevado numero de cruceros que navegan todos los fines de semana en la bahía santanderina es una reflexión que deberían hacerse los responsables, tanto de la vela cantabra como de la flota de cruceros, puesto que posibles participantes hay en cantidad. Se llegaría a más de un centenar si participasen los que en estos momentos no toman parte en las regatas de crucero, lo que con un poco de ayuda y entusiasmos seria posible el iniciar a estos en tan apasionante actividad.

El viento que soplo del Este, pasó de soplar con 5 nudos en los momentos anteriores a la salida a llegar a alcanzar los 18 en casi todo el resto de la regata.

En esta ocasión el Comité estableció un recorrido 7 del programa, con lo que los participante pudieron disfrutar de una excelente navegación, con ceñidas de mas de tres millas y unas magnificas empopadas.

La salida y entrada se dio desde el Club, desde donde había que navegar hacia el norte de la isla de Santa marina, en donde se encontraba fondeada la primera Baliza del recorrido, desde esta había que dirigirse hacia la ensenada de los Molinucos en donde estaba fondeada la segunda marca, para volver a la de Santa Marina y desde allí al Club para terminar.

Nuevamente la localización de las balizas fue lo mas complicado para las tripulaciones, sobre todo para las mas pequeñas con poco franco bordo, lo que las perjudica enormemente ya que les imposibilita de confeccionar su táctica hasta la exacta localización de las boyas, lo que en días como hoy en que la mar era de mas de un metro, era una misión casi imposible.

La salida fue valida a la primera siendo nuevamente las tripulaciones del Boro y del Gabriela Onofre las que primero cortaron la línea en demanda de l la baliza de barlovento.

Desde este instante la tripulación del Boro se coloco a la cabeza de la flota y a pesar de no izar el Spy en mas de la mitad del ultimo tramo de la regata se impuso en la general, como era de esperar en base a sus 45 pies, los que en nada se pueden equiparar a las embarcaciones de menos de la mitad de su eslora. Preguntándose las embarcaciones pequeñas s que es lo que hacen tomando la salida en conjunto con las grandes, lo que no tiene sentido el que sea así, entre otras cosas por la diferencia enorme que existe de maniobrabilidad en estos barcos en situaciones como son las de la salida.

La navegación en demanda de la primera marca fue un duelo entre las tripulaciones del Murphy, del Gabriela Onofre y del Marieta que navegaron todo el tramo en un puño, mas retrasadas, como consecuencia de su salida, las del Proinco, Soledad, Kirios, Airan y Unico se iban quedando rezagadas.

A falta de memos de una milla para montar barlovento, una avería en sus velas hizo que el Murphy abandonase la competición.

El Boro continuo en cabeza, montando tras él el Co Yemaya, que a pesar de su eslora no aguanto su rating y termino en la octava posición. A continuación y en menos de una eslora montaron el Marieta y el Gabriela Onofre, mas retrasados lo hicieron el resto de la flota.

En la empopada hacia los Molinucos las planeadas fueron espectaculares sobrepasándose los 12 nudos en las bajadas de las olas. En este tramo el genaquer del Marieta se defendio estupendamente del Simetrico del Gabriela Onofre, montando ambos nuevamente la baliza en menos de una eslora.
La maniobra de arriada y trabuchada encima de la baliza fue la que marco la regata, los del Marieta tuvieron problemas con su foque mientra que los del Gabriela Onofre salieron airosos de la difícil maniobra.

En el resto de la regata las distancias se fueron haciéndo mayores.

En el último tramo hacia la entrada los barcos grandes tardaron mucho en izar sus spys, lo que no les fue óbice para sacar sin problemas su handicap a los demás participantes. Tras la compensación de tiempos la clasificación ha sido:

1º Boro clase I de Salvador Albiñana

2º Gabriela Onofre, clase II de Chiqui García de Soto

3º Marieta, clase I de Pedro Guijarro

4º Ramboli, clase I de Federico Rodríguez

5º Airan 5, clase II de Mario Ruiz de Villa

6º Soledad, clase I de Francisco Muñiz

7º Unico, clase II de Juan Vidal

8º Coyemaya, clase I de Javier Gonzalez

Se retiraron

El Karen, el Kirios y el Murphy

Tras la celebración de la segunda jornada del trofeo la clasificación es

1º Boro

2º Gabriela Onofre

3º Marieta

4º Proinco

Clase II

1º Gabriela Onofre

2º Airan 5

3º Unico