Un monstruo llamado corriente en el Mar del Norte
Así define Matt Knighton, reportero del Abu Dhabi Ocean Racing, la corriente que han encontrado durante la noche de hoy. La flota de la Volvo Ocean Race atraviesa en estos momentos uno de los lugares con las mareas más fuertes del mundo: la Bretaña francesa. Alvimedica se ha puesto en cabeza y MAPFRE sigue segundo, pero todos en un puño de 2.5 millas.
"Como si tuviéramos un monstruo debajo que hace con el barco lo que quiere. La corriente agarra las aletas y sacude el barco". Con estas palabras se refería Matt Knighton en su blog de hoy a la enorme corriente que la flota ha encontrado durante la primera jornada de la etapa 9.
Tras tomar la salida en Lorient ayer a las 17:00, los equipos han superado hoy la Bretaña francesa, rodeando la punta más occidental de Francia. Junto con Normandía, es el lugar con las más grandes mareas de Europa, y uno de los primeros del mundo. Algo más adelante, en Saint Malo, la diferencia entre la bajamar -marea baja- y la pleamar -marea alta- puede alcanzar los 12 metros.
"Parece que el agua hierve. Ríos de corriente pasan junto a parches de agua inmóvil como alfombras en el mar. La marea acaba de cambiar y estamos intentando atravesarla", añadía el reportero inglés.
Para acabar de complicarlo, prácticamente desde que salieron han tenido viento suave, que por momentos no les ha permitido hacer más de 3 o 4 nudos de velocidad.
Tras elegir el bordo de mar durante las útlimas horas, Team Alvimedica ha conseguido ponerse en cabeza, mientras que MAPFRE continúa segundo, y Brunel es tercero. Los barcos que han optado por quedarse más hacia tierra, Abu Dhabi y Team Vestas Wind, han perdido terreno, y son ahora sexto y séptimo respectivamente, por lo que todo indica que la opción exterior ha ganado en las últimas horas.
A última hora de la tarde de ayer, las chicas de Team SCA fueron las más osadas: decidieron no rodear la Ile de Seine por el exterior, como el resto de barcos, sino pasar por el estrecho canal que la isla forma con la Francia continental. Allí, a punto estuvieron de tener que echar el ancla. "Nos acercábamos y (la marea) cada vez era más fuerte. El barco empezó a moverse en varias direcciones, el viento era débil, y comenzamos a derivar lateralmente. No lo íbamos a conseguir. ¡La corriente era demasiado fuerte!", contaba una expresiva Anna -Lena Elled. Les costó tres intentos, pero finalmente consiguieron atravesarla. Al llegar al otro lado habían pasado de ser últimas, a cuartas.
Aunque luego volvieron a caer al fondo del pelotón cuando la flota convergió, ahora se encuentran en quinta posición. En cualquier caso, la distancia entre primero y último es de sólo 2,5 millas.
Esta tarde los barcos deberían poder cambiar de marcha, pues la previsión indica que el viento aumentará del Oeste hasta situarse en el rango de los entre 15 y 22 nudos,
Se prevé que la flota llegue a La Haya entre las 16:00 CEST del jueves y las 07:00 CEST del viernes.