The Ocean Race, etapa 3: El viento llega a la flota al encontrarse con el primer sistema meteorológico del sur

La flota IMOCA ha pasado el Cabo de Buena Esperanza poco más de un día después del inicio de la etapa de 12 750 millas. Los cinco monocascos ahora navegan hacia el sur, mares con las condiciones de navegación más hostiles del planeta.
El Team Holcim-PRB patroneado por Kevin Escoffier fue el primero en pasar la longitud del Cabo (18° 28' 25.21 E"), seguido por GUYOT environnement - Team Europe y luego Team Malizia.

Biotherm de Paul Meilhat tras atracar porr daños durante la salida del domingo y reincorporarse a la regata a las 22:21 horas (UTC) del domingo 26. Cruzaron la línea del Cabo de Buena Esperanza poco más de seis horas por detrás del barco líder.

La flota ha navegado en un área de viento ligero y se dirige hacia una de las áreas más inhóspitas del planeta, los cuarenta rugientes. Las velocidades a bordo de los líderes aumentan a medida que pelean con vientos más fuertes que soplan alrededor de los cuarenta grados de latitud sur. Toda la ruta de la Etapa 3 es zona de grandes temporales que se mueven rápidamente y olas gigantes e implacables, y será una prueba de resistencia y navegación para las tripulaciones de estos monocascos de última generación. El Comité de Regata ha establecido una zona de exclusión sur para evitar que la flota navegue demasiado al sur hacia la Antártida en un intento por evitar los peligros de los hielos flotantes.

La tabla de clasificación podría ver un cambio completo en las próximas semanas, ya que se ofrecen puntos dobles para la Etapa 3. Una línea de meta virtual que se extiende hacia el sur desde (143 ° E) determinará la adjudicación de un conjunto completo de puntos, seguida de una adjudicación adicional. de puntos en la meta real en la ciudad brasileña de Itajaí.

El viento ha ido llegando la etapa 3 de The Ocean Race a medida que los cinco IMOCA han bajado hasta latitudes más altas y han empezado a ganar este, enganchando el primer gran sistema meteorológico.

Después de un día de vientos flojos y corriente en contra, el viento fuerte es muy bienvenido. Pero viene con un estado de la mar muy duro, con una previsión de olas de hasta seis metros de altura cuando sigan bajando hacia el sur.

La flota parece estar de acuerdo en bajar hasta una latitud de 39 grados sur: en ese punto veremos en el tracker a los barcos trasluchar hacia el norte y nuevamente hacia el sur.

"La idea es encontrar una buena ruta, con buena velocidad y sin mucho viento ni olas enormes", afirmó el patrón del Biotherm, Paul Meilhat. "Serán días largos con condiciones bastante duras. Estamos bajando rápidamente hacia el sur".

"El viento se ha levantado mucho", describía Robert Stanjek a bordo del GUYOT environnement - Team Europe este martes. "Hemos visto hasta 32 nudos de viento. Navegamos con el viento a favor con el FR0 (vela de proa, código fraccional cero) y un rizo en la vela mayor con un poco menos de viento pero con olas más grandes. No es una situación fácil de manejar".

Mirando los mapas meteorológicos, la flota está comprimida entre el anticiclón que acaban de cruzar y una profunda borrasca, con fuertes vientos y grandes olas, que los empuja desde el sur y se mueve con ellos hacia el este.

"Tenemos una gran borrasca que cruzar. Este sistema no se mueve muy rápido, lleva casi la misma velocidad que nosotros, por lo que podríamos estar con él casi hasta Australia", dijo Tom Laperche desde el Team Holcim-PRB. "Las condiciones del viento y el estado del mar serán difíciles. Tenemos la opción de permanecer en el norte. Si vamos al sur, tendremos muchas horas con vientos de más de 40 nudos, demasiado".

Lograr el equilibrio adecuado entre velocidad y seguridad será la clave en la etapa 3. Es muy poco probable que alguno de los equipos haga un movimiento ganador durante estos primeros días, pero una decisión agresiva que acabe con roturas podría ser imposible de recuperar, por lo que es probable que la prudencia sea el factor predominante.