El proa del MUTUA MADRILEÑA se considera el portero del equipo

Con mucho detalle, con tranquilidad y sosiego, Paolo Botari desentraña las facetas que realiza sobre la cubierta del TP52 Mutua Madrileña en cada unas de las regatas:

“Haciendo un pequeño esfuerzo mental, llevo desde 1988 haciendo la proa como profesional en barcos de regatas, ya son más de veinte años. Las funciones de un proa a bordo de un barco TP52 como el Mutua Madrileña son muchas y diferentes. La primera de todas, nada más salir al mar, es que tengo que subir al mástil para enganchar la vela mayor en el tope del mástil tras izarla. Subir al mástil es la principal función, y la que más veces se repiten en cada regata; tienes que revisar toda la jarcia y drizas, las crucetas y tensar los obenques en función de las condiciones de viento y mar que tengas.
Una de las funciones importante del proa es ayudar al que lleva la caña del barco en las salidas, una tarea que se hace en conjunto con el navegante. El navegante da información al que lleva la caña, información que la obtiene a través del ordenador de a bordo, un ordenador no sabe si se equivoca o no, un ser humano si se esta equivocando se da cuenta y puede ajustarse. Es un trabajo que se realiza entre los tres: patrón, navegante y proa; para que el barco salga los más rápidamente en la salida. Es una parte muy importante porque un fallo en este momento de la regata puede resultar que la regata sea más difícil o imposible de ganar. Las salidas son fundamentales, a veces con una salida bastante mala puedes hacer un buen resultado, pero es muy difícil. La salida es parte importante en las regatas a vela, como en otros muchos deportes.

Otra función importante del proa, junto al segundo proa y el que esta en el piano, son todas las maniobras con las velas al paso de la baliza de barlovento, al final de la ceñida, y en la baliza de sotavento, al final de las popas, en recorridos barlovento sotavento, izando y arriando velas. O haciendo cambios de velas en cada uno de los tramos en función de las condiciones de viento. Y en las trasluchadas en los rumbos abiertos, el pasar bien el tango es una tarea muy importante. Sobre todo en la baliza de popa. Para mi es muy emocionante porque en estos rumbos el TP52 es muy rápido. La baliza de popa llega rapidísima. Es el momento más divertido de la regata para mí, junto la salida. Hay muy poco tiempo en la llegada a la baliza de popa, tienes que tener muy claro lo que hay que hacer, no te puedes equivocar y hay que hacerlo muy, muy, rápido.

Muchas veces mi trabajo depende de los que me están dando apoyo, tanto del segundo proa como del piano. En mis manos puedo tener drizas y cabos, pero son ellos los que los mueven, y si hay un mal entendido se puede producir un problema que no debiera, o que se me escape algo de las manos; es un trabajo de equipo. Nosotros somos un equipo dentro del equipo, somos el equipo de proa, trabajamos junto los demás pero somos un poco independientes. A veces necesitamos ser un poco independientes.
La comparación que puedo hacer, entre mi puesto de proa y otro deportista en otro deporte como pueda ser en futbol. Es un poco difícil, personalmente me siento como el portero de futbol, aun que el portero esta atrás y el delantero en punta del equipo, a bordo de un velero esto se invierte, yo estoy delante pero cubriendo como el portero.

La rapidez de una maniobra es importante pero lo importante es hacerlo lo justo. A veces es mejor hacerlo bien un poco más despacio, que mal y muy rápido. La calma es fundamental, hay que estar tranquilos porque hay momentos que el táctico no te puede ayudar porque aun no tiene claro como será la maniobra al final de la popa, cual será la baliza que vamos a virar. Hay que estar tranquilos, por eso decía antes que tenemos que ser independientes y estar muy metidos en lo que va a suceder porque desde popa no te pueden ayudar.

Mi espacio a bordo es el más estrecho en la proa pero soy el que más camina a bordo, voy desde la proa hasta popa y viceversa. Sobre todo cuando hay mucho viento como en Cagliari, donde yo iba totalmente a popa, en las traluchadas tenia que correr, y correr muy rápido, porque a veces no te avisan con bastante tiempo para poder hacer la trasluchada. Soy el que se mueve más en el barco.

Con mucho mar y viento, en popas estoy muy atrás por cuestión de peso, todas las maniobras necesitan muchos más tiempo por la dificultad de mantener el equilibrio, tienes que tomártelo con un poco más de tranquilidad, no puedes perder las cosas de las manos. Y cuando tienes mar llana lo puedes hacer mucho rápido, es más fácil.”