Yuchenko seguirá con el Náutico y ya programa la nueva temporada con el remo integrado en el programa municipal de escuelas deportivas
- “Queremos que los niños compitan, pero también buscamos jóvenes que hagan deporte por ocio”, dice la hispano-rusa
- La entrenadora de la sección de remo señala a media docena de jóvenes como los futuros valores de la sección
- Cree que la propuesta de liga de remoergómetro y la incorporación a las escuelas deportivas serán dos acciones muy beneficiosas
Anna Yuchenko, responsable técnica de la sección de remo del Real Club Náutico de Vigo, ya programa la temporada 2015/2016. En la sociedad que preside Viviana García existe satisfacción por su trabajo y ella también está satisfecha.
La hispano-rusa, que esta semana da por concluidos los entrenamientos, una vez finalizadas en julio las últimas competiciones, se ha mostrado “contenta” con el trabajo de la sección, totalmente renovada esta campaña y que paso a paso ha ido progresando.
“Se da entrada a los deportistas para que compitan, pero también para que aprendan y disfruten de su ocio”, explica Anna Yuchenko. Desde que en noviembre se hizo con las riendas de la sección, la entrenadora ha aplicado una metodología participativa sin exclusiones. Entiende que para el crecimiento del remo en el Náutico no solo se debe de vivir de las medallas o de grandes resultados, sino también de los jóvenes que desean invertir una parte de su tiempo en disfrutar remando sin presiones competitivas.
“Pretendo que tengan interés, que sientan el deporte”. Esa ha sido su exigencia, junto con la seriedad de los entrenamientos: “Cuando cogemos los remos y el bote tienen que olvidarse de todo lo demás”. Antes y después de ese tiempo de duro entrenamiento, Anna es otra, más permisiva, y se ha ganado a la veintena de remeros de esta temporada.
“Quiero que sean educados, respetuosos y deportistas”, manifiesta Anna Yuchenko. Sus valores son también los que identifican al Real Club Náutico de Vigo. Incluso ha ido un paso más allá: los jóvenes reparan y cuidan el material para “querer más el bote”, dice.
Este año han caído dos medallas internacionales de Álvaro Blanco (con España en el equipo juvenil que participó en la Copa de la Juventud en Hungría), aunque Yuchenko cree que Blanco se merecía haber ido al Mundial junior (“era mi ilusión y él había hechos buenos tiempos”, explica), y dos platas también suyas en el Nacional de remoergómetro y en el absoluto (skiff).
Además, en el Náutico han destacado promesas como los infantiles Ramón Ameneiro y Juan Comesaña, “con muy buenas regatas en el doble scull en el Nacional”, los alevines Yoel Pozo y Bruno Misa, la sub 23 Alejandra Domínguez o la cadete Alejandra Aláez, aunque su frase más repetida siga siendo un “falta mucho por trabajar. A principios de temporada no me planteaba podios pero con el trabajo diario vi que podíamos conseguir uno o dos”.
Para la próxima temporada, Yuchenko tiene puestas muchas esperanzas en el programa municipal de escuelas deportivas, que comienza en octubre y al que el Náutico se ha incorporado, y en la propuesta de liga local de remoergómetro, en la que el club puede captar nuevos valores a través de los centros educativos.